urge reactivas el mercado interno
Comarca Lagunera.- Empresarios y actores políticos tratan de ser optimistas respecto a las expectativas para 2004, sin embargo reconocen que el panorama es difícil. Sobre todo cuando las Reformas Estructurales parece que nunca llegarán.
Pero además de los problemas en el Congreso los Alcaldes de la Comarca Lagunera se enfrentan a un problema mayor: los recortes presupuestales. El tener menos recursos les impide realizar obras, así como lograr una certera planeación en su administración.
“Nosotros tuvimos un recorte aproximado de 18 millones de pesos, que no llegaron”, comenta la alcaldesa de Gómez Palacio, Leticia Herrera, “no quiero entrar en polémica porque sí lo he venido escuchando que se echan la bolita: que si el Gobierno del Estado, que si el Gobierno Federal, que si el Gobierno de Leticia, yo no sé, pero la realidad fue que hubo un recorte de 18 millones de pesos”.
Luis Fernando González Achem, alcalde de Lerdo, comenta que en los últimos años en el municipio surgieron 23 nuevas colonias, quienes demandan servicios primarios, la falta de recursos impide solucionar muchos problemas.
Sin embargo Guillermo Anaya es más positivo, afirma que para contrarrestar los recortes se requiere habilidad suficiente para hacer de un peso dos y que así los planes del municipio de Torreón no se vean estancados.
“Debemos tener la habilidad como lo hicimos este año, que a pesar de las dificultades que hubo, Torreón salió con el mayor presupuesto de todo Coahuila y de toda la Comarca Lagunera. Sorteamos bien las dificultades. Este 2004 debemos hacerlo así, debemos tener habilidad de coinversión con el Gobierno del Estado y Federal para hacer de un peso dos o tres”.
Dice la Iniciativa Privada
El empresario Rafael Villegas Attolini dice estar en desacuerdo con la política económica del Banco de México, ya que están cuidando la inflación y con reservas de 54 mil millones de dólares pudieran soltar un poco la inflación y el circulante para que la gente pueda consumir más, “los comercios se beneficien y haya más posibilidades de crear empleos. Ha sido demasiado freno a la economía”.
De cualquier forma, el también ex presidente de Gómez Palacio, considera que se debe ver con optimismo el siguiente año, “no así de echar las campanas al vuelo, pero debe ser mejor que éste, por lo menos si se aprueban las Reformas veríamos un año con inversiones mexicanas y extranjeras y la Reforma Energética sería una gran oportunidad para atraerlas y volvernos más competitivos, pues en la actualidad la energía es 60 por ciento más cara que la de Estados Unidos y Canadá”.
Para los comerciantes las expectativas para el cierre del 2003 son en niveles similares al 2002, es decir, sin crecimiento.
Ante este negro panorama Luis Cuerda Martínez, presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Torreón, Canacoto, advierte la urgencia de aprobar las Reformas, al tiempo que hace un llamado al presidente Vicente Fox para cambiar la forma de administrar el país.
Comenta que no se ha dado la inversión necesaria, no hay suficiente infraestructura, se ha desatendido el mercado interno, lo cual hace ver a los productores mexicanos en marcada desventaja con los extranjeros, sobre todo los de Asia, que ha traído como consecuencia el cierre de empresas manufactureras.
“Pensamos que si las Reformas Estructurales no se dan para el establecimiento de nuevas estrategias económicas por parte del Gobierno Federal, vamos a seguir con este mismo problema el año entrante. Es importante que los señores legisladores tomen en cuenta la necesidad que tiene México y se olviden, aunque sea por una sola vez, de las necesidades de sus partidos”.
Esta visión es compartida por el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) de Gómez Palacio, Augusto Álvaro Longoria, considera que el mercado interno resultaría atractivo para el industrial, siempre y cuando se reactive la economía, pero no hay movimiento y mientras tanto se compite con empresas asiáticas y norteamericanas, las cuales llevan ventajas enormes por sus bajos costos de producción.
“El 2003, por un gran desgaste en virtud que la política económica, ha venido erosionando el sector industrial y debido a ello, los Tratados de Libre Comercio han resultado perjudiciales”.
Aunado a todo ello, expone, la importación ilegal de mercancías, han hecho de México un país consumidor y no transformador, lo cual es muy grave para la economía mexicana, al no generar riqueza y quitarle la oportunidad a los trabajadores de un empleo bien remunerado.
Por este motivo el dirigente de los industriales laguneros de Durango, considera necesario crear el ambiente propicio para que las empresas crezcan y se desarrollen, lo cual debe estar dado por el Gobierno Federal a través de las Reformas Estructurales y la Fiscal, para generar mayores recursos, donde todos paguen impuestos.
Asimismo, destaca la urgencia de la Reforma Energética, que ponga en la misma base los precios de la energía que pagan los socios comerciales, además de la Reforma Laboral, con leyes más flexibles y adecuadas a la realidad actual y también la Reforma Jurídica, de la cual se habla poco pero es necesario incluir las Reformas en la Constitución.
Desaliento
El sociólogo Lerins Varela Casto comenta que la perspectiva es más desalentadora para el próximo año si se toman en cuenta los pormenores de la propuesta fiscal, donde predomina la intención de gravar las prestaciones de la clase trabajadora como son los bonos de despensa, aguinaldo y vacaciones.
El sociólogo considera que la situación es un tanto grave, partiendo del hecho de que hace más de 20 años que en nuestro país no se hacía ninguna referencia sobre la necesidad de realizar paros nacionales “que independientemente de si se efectúan o no, al menos ya se tiene el antecedente del malestar de las organizaciones”.
El economista Luis Felipe Rodríguez Aguilar considera que el panorama para 2004 es sombrío y muy similar al que se ha padecido este año.
Esto debido a que todavía hay muchos aspectos irresueltos por la falta de acuerdos políticos en la relación Congreso-Presidente-Partidos Políticos, de tal manera que otra vez la política le está ganando terreno a la economía.
A su vez, los mercados están atentos al comportamiento sociopolítico y si no hay operadores políticos que garanticen acuerdos que generen un crecimiento económico, la economía mexicana continuará estancada.
Lo urgente, dice el economista, es reactivar los mercados internos mediante la intervención del Estado “aunque parece que éste no es un camino viable del actual Gobierno”.
Respecto de la propuesta fiscal, considera que en México y otros países ha sido pospuesta desde hace varias décadas.
“Los actores políticos no establecen un consenso para derivar una Reforma a profundidad, porque en México desafortunadamente, nadie quiere pagar el costo político de ello”.
Según manifiesta, la Reforma puede darse sin aumentos de carácter impositivo, sino con otros mecanismos para que el Estado pueda tener recursos.
De antemano, tendría que descartarse la aplicación del Impuesto al Valor Agregado a alimentos y medicinas y buscar mecanismos internos como la reducción de áreas del Estado que no son importantes en su funcionamiento; revisión de los sueldos estratosféricos de funcionarios públicos y legisladores así como del gasto corriente que se destina a áreas improductivas; gravar más a los que más ganan; reducir los subsidios y transferencias no a los sectores marginados, sino a los de mayores ingresos.
Deseos encontrados
El alcalde Guillermo Anaya afirma que 2004 será un año decisivo para que Torreón ingrese a la modernidad. Tiene muchos planes que asegura llevará a cabo a pesar de los recortes presupuestales, el Pabellón Hidalgo, la reubicación de ambulantes en el sector poniente, el mercado Nuevo Alianza, la ampliación del bulevar Diagonal Reforma, de hecho el edil define 2004 como desarrollo urbano.
Por su parte Leticia Herrera y Luis Fernando González Achem no son tan optimistas como Guillermo Anaya, prevén un año difícil, sus administraciones no terminarán con los recursos suficientes para realizar todas las obras que desean.
“Esperemos que sea un año mejor que éste”, dice con un tono de esperanza Leticia Herrera, “pues hacen falta recursos, todas las obras se hacen con dinero y eso es lo que nos hace falta: dinero”.