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COMITÁN, Chis.- Ocho personas fueron asesinadas y cinco quedaron gravemente heridas, en un rancho ubicado a pocos metros del río Suchiate, que sirve de línea divisoria entre México y Guatemala, informó el subprocurador de Justicia, zona costa, Gonzalo Mario Díaz Castellanos.
La múltiple ejecución ocurrió la tarde del domingo en el rancho “JR”, propiedad del finquero Raúl Nava, y fue perpetrada por un grupo de personas armadas no identificadas.
El paramédico de la Cruz Roja Mexicana, Alejandro Rodas López, dijo que dos de los cuerpos, el de una mujer y una niña, estaban en el interior de una de las viviendas del rancho, mientras que seis más se encontraban en la parte trasera y corredores de la propiedad. Todos estaban con los pies y manos atados, boca abajo y con un tiro de gracia.
Los equipos de salvamento confiaron además que uno de los sobrevivientes es de origen guatemalteco.
Cuatro de los heridos, en su intento por huir de los agresores, quedaron tirados a pocos metros de la carretera que enlaza los municipios de Cacahoatán y Tuxtla Chico, donde fueron auxiliados por autoridades de esta última demarcación.
Tres de las personas muertas han sido ya identificadas como Felipe Meza Ortiz y Rogelio Sánchez, de 40 y 45 años de edad, respectivamente.
El cuerpo del encargado del rancho, de nombre Luis “N”, originario de Guatemala, fue localizado en uno de los pasillos exteriores de la casa.
Dos de los heridos fueron identificados como Javier Ramírez Soto y Rudy López Vázquez, de 18 y 13 años de edad.
Justino Sánchez Pérez, familiar de estos jóvenes heridos, narró que hacia las 17:00 horas del domingo pasado, Javier y Rudy salieron del ejido La Soledad, del municipio de Cacahoatán, con la finalidad de ir a pescar al río Suchiate.
Aunque se dijo que la ejecución ocurrió a las 19:30 horas, ésta pudo haber sido antes de las 17:00 horas, debido a que una patrulla de la Policía Municipal de Tuxtla Chico llegó a las 17:00 horas a la propiedad y, según la versión de algunos agentes que pidieron el anonimato, aún se escuchaban los disparos de arma de fuego, pero optaron por no ingresar al lugar de los hechos, ante la carencia de armamento.
La Procuraduría de Justicia del Estado informó que los sicarios usaron cartuchos .38 y nueve milímetros para realizar las ejecuciones.
El domingo por la noche, los cuerpos de socorro tuvieron dificultad para poder ingresar hasta donde estaban los cuerpos, pero después de los peritajes realizados por la Procuraduría de Justicia del Estado se les permitió el ingreso.
Desde anoche, aproximadamente 300 elementos del Ejército y corporaciones federales y estatales se apostaron alrededor del rancho.