Luiz Inácio Lula da Silva y Hugo Chávez, presidentes de Venezuela y Brasil firmaron una declaración conjunta, en la que especifican sus coincidencias de índole regional y mundial. (/i)
26 agosto 2003
Caracas, (EFE).- Los presidentes de Brasil y Venezuela, Luiz Inácio Lula da Silva y Hugo Chávez, respectivamente, firmaron hoy una declaración conjunta en la que resumieron sus coincidencias respecto a asuntos de índole regional y mundial.
La declaración, que consta de 27 puntos, destaca la urgencia de luchar contra "la pobreza y la exclusión social" y de establecer estrategias comunes para mejorar la calidad de vida de los venezolanos y brasileños.
En ese sentido reconocieron la importancia que tendrá el Foro de Alto Nivel sobre Pobreza, Equidad e Inclusión Social, patrocinado por la Organización de los Estados Americanos, a efectuarse en la Isla de Margarita, Venezuela, del 8 al 10 del próximo mes de octubre.
También incluye una referencia a la Alternativa Bolivariana para América Latina (ALBA), que es la respuesta venezolana al Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA) patrocinado por Estados Unidos.
La declaración saluda los resultados de la reunión de los Cancilleres de MERCOSUR y de la Comunidad Andina, celebrada el 4 de agosto de 2003, en la que acordaron concluir el proceso negociador antes de finalizar el año para que pueda consolidarse el Espacio de Integración de América del Sur.
Además, reconoce la importancia de la V Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio a efectuarse en Cancún, México, para la liberalización del comercio agrícola, entre otras cosas.
Reitera la preocupación por los problemas derivados de la deuda exterior y de la inestabilidad de los flujos financieros y reconoce la contribución de las empresas en el desarrollo integral de los países.
En la declaración, ambos gobernantes se comprometen a consolidar la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica y a reafirmar el multilateralismo así como a tratar de reformar y revitalizar la Organización de las Naciones Unidas, fortaleciendo la Asamblea General y confiriendo mayor representatividad a su Consejo de Seguridad.
En el plano bilateral, la declaración incluye referencias a la buena marcha de la construcción del segundo puente sobre el Río Orinoco, a cargo de una firma brasileña, y a los avances en la cooperación entre Petróleos de Venezuela (PDVSA) y PETROBRAS.
Igualmente destaca la prioridad que para ambos gobiernos tiene la justicia social y resalta la experiencia de Brasil en la aplicación del Sistema Unico de Salud, así como la necesidad de concluir un Acuerdo Complementario al Convenio Básico de Cooperación Técnica en Materia de Producción Agropecuaria y Desarrollo Rural.
La declaración incluye luego varios aspectos vinculados a acuerdos bilaterales de índole aduanera, cultural, minera, limítrofe, de lucha contra el tráfico de drogas y de transporte internacional.
Por otra parte, la declaración condena el ataque contra las Naciones Unidas en Bagdad y expresa su solidaridad a la ONU y a los familiares de las víctimas, especialmente al enviado de ese organismo a Bagdad, el brasileño Sergio Vieira de Mello, a quien califica de "insigne luchador por la causa de los derechos humanos y la paz mundial".