Torreón, Coah.- A partir del presente año las empresas se encontraran en la disyuntiva de pagar o no pagar el Impuesto del Crédito al Salario.
Juan José Rosado Robledo, presidente del Colegio de Contadores Públicos de La Laguna precisó que con relación al Impuesto del Crédito al Salario se hizo una adecuación de las disposiciones del año pasado. La definición era pasar esta carga de impuestos a las empresas, y con la modificación que se hace este año, el impuesto será absorbido totalmente por el empresario, sin embargo se pueden llevar a cabo dos procedimientos: donde se puede pagar o no pagar.
Aquí con salarios bajos al empresario le conviene no pagar el impuesto, sin embargo, con salarios altos, la opción de no paga no es conveniente. Detalló que la carga máxima es de cuatro por ciento, sobre la base de los sueldos, así entre menos gane más grande será el subsidio que el empresario tendrá que absorber.
Este subsidio anteriormente lo absorbía el mismo gobierno para la clase trabajadora, y ahora lo que se pretende es que el empresario absorba este impuesto.
Rosado Muñoz evaluó que depende mucho de los procedimientos y los cálculos para estimar de cuanto es el impuesto y para ver cual es la opción que más le conviene, la opción de no pagar corresponde al equivalente del equivalente del crédito al salario, por lo que de todas formas tiene que desembolsar, sin embargo, el objetivo es que sea menos. ?Para poder recomendar, es necesario hacer un análisis de los sueldos y salarios de las empresas. Si son bajo es mejor no pagar y si son altos es mejor pagar, y si dan salarios altos y bajos, se tendría que hacer un balance?.
Siguen afectando a los restaurantes
Por otro lado, a los restaurantes les quitaron el cinco por ciento de impuesto suntuario, sin embargo el deducible será de un 25 por ciento sobre el consumo contra el 50 por ciento que era anteriormente. El presidente de los Contadores Públicos de La Laguna evaluó como una mala política para este sector ya no será conveniente consumir en restaurantes, debido a que sólo será el 25 por ciento sobre el monto de la erogación. Esto deja entrever que le siguen pegando a la industria restaurantera.