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México, DF.- La Cámara de Diputados aprobó ayer una reforma que plantea una alternativa que permitiría la donación de órganos por personas sin vínculos familiares o parentesco con el paciente, para así fomentar una cultura en la materia en el país.
En la sesión ordinaria en el Palacio Legislativo de San Lázaro, se aprobaron reformas a la Ley General de Salud, así como para desarrollar programas y actividades de educación en materia de prevención, tratamiento y control de la obesidad y la desnutrición. El dictamen con proyecto de decreto que reforma la fracción II del Artículo 333 fundamentado por el presidente de la citada comisión legislativa, José Ángel Córdova Villalobos, tiene por objeto promover y fomentar la cultura de la donación de órganos.
Esto permitirá a las personas con lazos afectivos de amor, amistad o cariño con el receptor donar un órgano o tejido, manteniendo el espíritu de altruismo.
Planteó que será necesario que cumpla con los requisitos de la ley vigente y se regule que la donación expresa se manifieste a través de un documento público o privado, creado y firmado por la persona donante, emitido para dichos efectos".
El diputado del PAN afirmó que la modificación propuesta establece que para realizar trasplantes entre vivos, se deberá tener parentesco por consanguinidad, por afinidad o civil, o ser concubina o concubinario del receptor y, aclara que, cuando se trate de trasplante de médula ósea no será necesario este requisito.
Estipula que en ausencia de donador relacionado por vínculo de parentesco, por impedimento médico o por falta de voluntad de algún pariente, se aceptará la donación de la persona que tenga relación emocional.
Aclaró que en forma previa se debe manifestar esa situación ante la Secretaría de Salud o ante quien ésta designe, de la ausencia de ánimo de lucro o interés comercial y su ánimo de altruismo y solidaridad.
Destacó la necesidad de promover la cultura de donación a fin de que un mayor número de personas pueda ceder sus órganos a otros, pues la falta de ella hace más difícil solucionar un problema que condena a la muerte a miles de personas.
Dijo que el impedimento legal para que personas que no son familiares del paciente donen sus órganos, se convierte en un problema médico y social, que pone en riesgo la vida de muchos pacientes, que depende de la posibilidad de conseguir un órgano.