Reuters
MÉXICO, DF.- Los presidentes de México, Vicente Fox, y de Estados Unidos, George W. Bush, sostendrán mañana en Nueva York una reunión en la que hablarán de migración, después de que el tema quedó congelado desde los atentados del 11 de septiembre, informó ayer la cancillería mexicana.
Los dos presidentes, que se distanciaron por sus posturas diferentes en la guerra de Iraq, se reunirán en un almuerzo que ofrecerá el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, a los jefes de Estado que participarán en el 58 período ordinario de sesiones de la Asamblea General de la organización.
“Se ha programado que estén los dos presidentes juntos en asientos contiguos durante la comida, para tener oportunidad de dialogar de los temas principalmente bilaterales de la relación”, dijo el subsecretario de Relaciones Exteriores, Enrique Berruga.
Los atentados del 11 de septiembre del 2001 en Nueva York, Washington y Pennsylvania -en los que murieron más de 3,000 personas- hicieron que se congelaran las negociaciones de un pacto migratorio que promueve México con Estados Unidos, su principal socio comercial, debido a que el gobierno de Bush puso en primer plano la seguridad de sus fronteras.
“De parte de México, el énfasis buscará que se plasme precisamente en la relación bilateral... temas como migración, frontera, seguridad, accesos en el tránsito de la frontera”, dijo Berruga.
Fox busca el acuerdo migratorio para que mejore la calidad de vida de entre tres y cinco millones de inmigrantes ilegales en Estados Unidos, pero su iniciativa enfrenta una fuerte oposición en el Congreso de Estados Unidos y por parte de grupos opuestos a la inmigración.
, que temen la pérdida de empleos a manos de los inmigrantes.
México, miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, no apoyó y hasta condenó la guerra que Estados Unidos y Gran Bretaña lanzaron en marzo contra Iraq.
Fox sostendrá también encuentros bilaterales en Nueva York con los presidentes de Argentina, Néstor Kirchner, y de Perú, Alejandro Toledo, así como con el canciller alemán, Gerhard Schroeder, entre otros, dijo Berruga.