LA HABANA (AP).- Tres hombres que secuestraron una lancha con la intención de llegar a Estados Unidos fueron fusilados en la madrugada del viernes luego de un juicio sumario, informaron las autoridades.
Los atacantes desviaron el dos de abril una embarcación usada para transportar pasajeros por la bahía de La Habana. La nave fue remolcada por las autoridades, que la alcanzaron en alta mar al quedarse sin combustible.
Los 50 rehenes permanecieron secuestrados hasta el 3 de abril por la tarde, cuando la policía asaltó la embarcación y detuvo a los secuestradores.
Una nota oficial leída en la televisión el viernes dijo que Lorenzo Enrique Copello Castillo, Bárbaro Leodan Sevilla García y Jorge Luis Martínez Isaac _ que según las autoridades comunistas fueron los "jefes más brutales" del incruento secuestro en el que nadie resultó herido, fueron sentenciados a pena de muerte y ejecutados.
Otros 4 implicados, Maikel Delgado Aramburo, Yoanny Thomas Gonzalez, Harold Alcala Aramburo y Ramon Henry Grillo, fueron condenados a cadena perpetua y otro más a 30 años de cárcel.
De las tres mujeres que habrían actuado de cómplice y acompañado a los hombres, Wilmer Ledea Pérez fue condenada a 30 años; Ana Rosa Ledea Ríos, a 5; Yolanda Pando Rizo, a 3 y Dania Rojas Gongora, a 2 años de cárcel.
Los acusados apelaron "de inmediato", la decisión judicial, la cual también fue ratificada en esta instancia superior.
Las ejecuciones en Cuba son ratificadas por el Consejo de Estado, encabezado por el presidente Fidel Castro.
El Consejo de Estado evaluó "los peligros potenciales que implicaban no sólo para las personas inocentes, sino para la seguridad del país", indicó la nota, y agregó que "al amanecer de hoy las sanciones fueron aplicadas".
El desvío de la lancha ocurrió en medio de crecientes tensiones entre Estados Unidos y Cuba y fue el tercer incidente en menos de un mes.
El 19 de marzo fue asaltado un avión DC-3 desde la Isla de la Juventud con una treintena de pasajeros a bordo. El 31 del mismo mes un AN-24 corrió la misma suerte en la misma localidad con otras 40 personas en la nave.
Todos los ataques fueron perpetrados por hombres armados.
Cuando la lancha fue asaltada y se encontraba a la deriva en aguas internacionales, Washington rechazó intervenir en el caso.
Ese mismo día, el jefe de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana, James Cason, hizo leer un comunicado en el cual advirtió que no serían admitidos en su país quienes secuestraran naves.
Anoche, varios hombres asaltaron a un soldado, le quitó su fusil y varios de ellos fueron detenidos en el aeropuerto de la isla de la Juventud. Las autoridades dijeron que pretendían asaltar un avión y que varios de sus cómplices se fugaron.