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Madrid, España.- El presidente de Brasil, Luiz Inacio "Lula" da Silva, fue declarado ayer ganador del Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional 2003, anunció el jurado reunido en la ciudad de Oviedo, al norte de España.
El presidente del jurado, el ex mandatario español Leopoldo Calvo Sotelo, anunció que el premio se concede a Lula por ser "titular de un admirable pasado de lucha por la justicia, impulsor de políticas llenas de sentido y símbolo de gran esperanza".
El jurado reunido desde el martes en el capital del Principado de Asturias, analizó 14 candidaturas de 17 nacionalidades, pero la de Lula se apuntó desde el inicio de las deliberaciones como la más probable a ser ganadora.
En su acta, el jurado consideró que con este premio se reconoce "la trayectoria personal y política de Lula a favor de los trabajadores, contra la pobreza la desigualdad y la corrupción".
"También se reconoce su voluntad de establecer puentes de cooperación entre los países del Cono Sur, entre América y Europa, proponiendo un Foro Internacional de lucha contra el hambre", precisó el jurado.
Este es el séptimo de ocho galardones que anualmente se concede, luego de los fallados a favor de Ryszard Kapúscinski y Gustavo Gutiérrez en la categoría de Comunicación y Humanidades, y las escritoras Fátima Merssini y Susan Sontag, en Letras.
Además, Jörgen Habermas, en Ciencias Sociales, Jane Goodall, en Investigación Científica y Técnica, al Tour de Francia, en Deportes, Miquel Barceló, en Artes, mientras que el Premio de Concordia se anunciará el próximo diez de septiembre.
El Premio de Cooperación Internacional se concede "a la persona, grupo de trabajo o institución cuya labor haya contribuido de forma ejemplar y relevante al mutuo conocimiento, al progreso o a la fraternidad de los pueblos".
Las candidaturas que aspiraron a este galardón procedían de Bélgica, Brasil, Canadá, Colombia, República Checa, China, Chipre, Eslovaquía, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, México, Polonia y España.
El premio está dotado de unos 55 mil dólares, un diploma y una escultura del artista catalán Joan Miró, que será entregada en otoño próximo por el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, en un acto que se realizará en el Teatro Campoamor, de Oviedo.