Los productores de ganado no se deben “dormir en sus laureles” por el hecho que mejoró la categoría de la producción duranguense para la exportación, consideró en entrevista para EL SIGLO DE DURANGO el diputado Jesús Gerardo Pérez Sáenz, representante popular por el Distrito local IX.
Sin embargo, la acotación la hizo también para las autoridades de sanidad y las de los tres niveles de gobierno que estén relacionadas con la calidad de la carne que se produce en esta entidad.
La disminución de los requisitos para comerciar el producto a Estados Unidos podría revertirse de manera sobresaliente con un nuevo descuido como el que ocurrió anteriormente, cuando se le quitó al estado la categoría 3 y pasó a la 4.
Pérez Sáenz dejó claro que los problemas de sanidad que derivaron ese retroceso hace aproximadamente un año no pueden seguir presentándose, como tampoco puede seguir ocurriendo que se traslade ganado de otros estados como Veracruz, Guerrero o Chiapas sin una estricta revisión de sanidad.
“Lo que sucedió, y todos conocimos, fue que en Durango solamente se le estaban poniendo los aretes a muchas cabezas de ganado que no se había producido aquí. De esa forma llegaron reces con tuberculosis y la restricción no fue para ese ganadero en específico, sino para todos los de la entidad. Por eso ellos no se deben confiar, pero tampoco las autoridades”, detalló.
El legislador del PAN propuso que se respeten en realidad y al pie de la letra las reglas de exportación e importación de ganado en Durango, así como también las de producción, para que de esa forma se puedan aplicar sanciones más fuertes a quienes las infrinjan.