Varios esqueletos del genocidio de 1994 en Ruanda descansan en la iglesia de Ntarama. Ruanda celebró sus primeras elecciones en el mes de agosto del 2003 desde el genocidio de 1994, cuando extremistas Hutu trataron de echar fuera a la minoría tutsi, matando alrededor de 800,000 tutsis y hutus que se oponían a ellos.