AP
PEKÍN.- A pesar de la baja en el número de casos nuevos del síndrome agudo respiratorio severo, el gobierno de China advirtió que la lucha contra la enfermedad está “muy lejos de terminar” y que permanecerán vigentes las estrictas medidas de prevención, dijo ayer un importante funcionario del sector salud.
China, el país más afectado por el también llamado SARS, no anunció muertes nuevas ayer, pero dijo que se informó sobre otros tres casos. Al menos 334 personas han muerto a consecuencia del SARS en la China continental y cinco mil 329 han resultado infectadas.
Gao Qiang, viceministro ejecutivo de Salud, dijo que su gobierno no bajará la guardia ni se apresurará a declarar un éxito las acciones contra la enfermedad.
“Debemos mantener la atenta vigilancia y continuar con las iniciativas de prevención y tratamiento sin remisión”, dijo Gao durante una conferencia sobre prevención del SARS a la cual asistieron funcionarios chinos, japoneses y surcoreanos.
“Entendemos completamente que la lucha contra el SARS en China está muy lejos de haber terminado”, dijo Gao.
El país comunista ha impuesto restricciones al viaje, revisa a pasajeros de aerolíneas y trenes en busca de señales de fiebre y ha cerrado escuelas públicas y centros de entretenimiento en Pekín.
Aunque algunas escuelas han sido reabiertas en la capital, decenas de miles de personas en Pekín continúan bajo cuarentena, y unas 2.000 continúan aisladas.
Stephen M. Ostroff, subdirector del Centro Nacional para Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, dijo que los gobiernos deben determinar cuáles son las mejores medidas para contener la enfermedad y hacerlas cumplir, porque no podrán mantener todas las medidas vigentes hasta ahora.
“Tenemos muchas razones para creer que el SARS continuará siendo una amenaza ahora y en el futuro”, dijo Ostroff.