LONDRES, (Reuters) - El libro Guinness de Récords rechazó el acto más osado que hasta la fecha ha realizado el mago David Blaine, en el que estará en una caja de cristal pendiendo sobre el río Támesis.
El ilusionista estadounidense y "Houdini de los días modernos" estará suspendido en una caja de vidrio sobre el río por 44 días en ayuno y confinamiento.
Su única ayuda serán dos tubos: uno para recibir agua y otro para hacer sus necesidades. Además, el segundo servirá también para que los médicos controlen cómo evoluciona el estado de su salud.
Para dormir tendrá una esterilla y una manta y también dispondrá de un bolígrafo, pañuelos de papel y cacao para los labios.
Blaine goza de una gran popularidad en todo el mundo, especialmente en EEUU y el Reino Unido, gracias a sus comentadas hazañas, que también le han servido para conseguir una notable promoción publicitaria.
El mago, de 30 años, lleva anunciando este desafío varias semanas. Lo primero que hizo para ello fue subirse a una de las cápsulas de la gran noria de Londres (London Eye), mientras daba vueltas a una altura de hasta 135 metros.
Después, en una rueda de prensa, aparentó cortarse una oreja delante de todos los asistentes.
Pero de poco le ha servido tanta publicidad si lo que quería era entrar en el libro "Guinness" de los récords.
Y es que sus directivos le han negado que la hazaña, por muy bien que le salga, pase a formar parte de sus páginas porque no respaldan "récords de ayuno" -que podrían suponer un peligro para la salud-, y porque dicen haber visto "casas" más pequeñas que la elegida por Blaine para pasar estos 44 días.
"Por razones claras y obvias nunca hemos animado activamente a nadie para que, de forma voluntaria, no coma durante mucho tiempo", manifestó uno de los responsables del "Guinness", Stewart Newport.
"Si bates un récord y te mueres, ¿se puede considerar eso un éxito?" -añadió.
Blaine ha comentado que ahora pesa 93 kilos y que ha comenzado una dieta suplementaria de glucosa para afrontar el reto con más fuerzas. Y es que, durante estos días, está previsto que el mago, además de aburrirse soberanamente, pierda 20 kilos.
Hay quien dice que Blaine no es un mago, ya que sus desafíos son más bien pruebas de resistencia física.
Alfonso Ríos, un reconocido ilusionista español residente en Londres desde hace seis años y que conoce a Blaine, dice sobre su gesta: "Esto no es magia. Lo único que busca es provocar y que hablen de él".
"Blaine pensaba escapar de una caja lanzada al fondo del río, como hiciera el legendario Hudini, en 7 minutos. Pero con eso sólo hablarían de él durante un día, y con esto hablarán durante 44", comentó a EFE.
De todas formas Ríos reconoció que "Blaine es, sin lugar a dudas, el mago más carismático del mundo" y que en sus comienzos transformó el mundo de la magia", aunque ahora ya sólo le preocupa "la reacción de la gente".
El mago se enterró anteriormente en un ataúd de vidrio, permaneció inmerso en un enorme bloque de hielo y se lanzó de un pilar de 10 pisos de altura sobre cajas de cartón, pero dice que esto será aún más peligroso.
"Tenemos registros en nuestros libros que son mejores y más prolongados", dijo una portavoz del famoso libro de Guiness.
La portavoz comentó que el récord de ayuno corresponde al británico Dennis Goodwin, cuya huelga de hambre en la prisión de Wakefield de Gran Bretaña terminó en julio de 1973 tras 385 días.
Asimismo, agregó que Guinnes no anima los intentos de récords de ayuno y sólo los registra para propósitos históricos y médicos.
El récord de aislamiento, o confinamiento, corresponde al texano Bill White, quien permaneció enterrado vivo en una caja con poco espacio para su cuerpo por 141 días a dos metros de profundidad.
Blaine, un llamativo hombre del espectáculo que mezcla el misticismo de la Nueva Era con puro comercialismo, popularizó la magia callejera con sus programas especiales de televisión.
El mago no invitó al Libro de Guinness para certificar el acto, pero los verificadores expresaron su rechazo cuando las cadenas de televisión les pidieron que asistieran al evento.
Una de las hazañas más comentadas de Blaine tuvo lugar en Times Square de Nueva York en noviembre de 2000, cuando se pasó 61 horas encerrado en un bloque de hielo de seis toneladas.
Otros de sus retos, también en la "Gran Manzana" y ambos sin comida, fueron permanecer siete días enterrado en un ataúd y otros siete dentro de un tanque de agua.
Respecto a estos desafíos, los encargados del "Guinness" le han respondido que en ninguno de ellos ha batido un récord, porque todos han sido superados por alguien.