San Sebastián, España.- Ya hasta parece una costumbre que cada año, la mejor fiesta del Festival Internacional de Cine de Donostia San Sebastián, tiene que ser la mexicana.
Hace dos años lo demostró Y tu Mamá También, hace uno, El Crimen del Padre Amaro y este año, Sin Ton ni Sonia se encargó de que el tequila y la salsa tabasco rondara por el Bataplán, la exclusiva discoteca ubicada a orillas de lo que llaman la playa de la Concha.
Pero para conseguir una fiesta inolvidable hacen falta algunos elementos, como los invitados, la música y un pretexto para celebrar, y la cinta de Carlos Sama conjugó felizmente los tres ingredientes.
Comencemos por la lista de invitados: Mariana Gajá, Arturo Ripstein, Paz Alicia Garciadiego, Cecilia Suárez, Juan Manuel Bernal, Chema Yazpik, Diego Luna, Martha Sosa, Antonio Chavarrías, Julio Médem, Alfredo Joskowicz, Phillipe Alexander, Hugo Rodríguez, Mónica Lozano, Laura Imperiale, Lucas Crespi, Jorge Mondragón, Ania Lechuga, Oscar Uriel, Kenya Márquez y Daniel Lorenzo.
Desde Juan Gabriel hasta los Pasteles Verdes se escucharon durante la velada, con intervenciones de Carlos Santana y mucha, pero mucha música latina y algo de electrónica. Y ¿cuál era el motivo para celebrar? Eso es más difícil de responder, pero obviamente el lanzamiento de Sin ton ni Sonia en España y también el promedio del cine mexicano, en donde se realizan 12 películas al año y cuatro llegan a los festivales más importantes del mundo, una o dos tienen éxito en taquilla y el resto por lo menos consigue estrenarse.
La juerga terminó a las 5:30 de la madrugada porque el Bataplán ya no soportó a los no pocos mexicanos que se resistían a ir a dormir a su hotel.
Es que si me voy a mi hotel tengo que estar despierto, porque hay huelga y cacerolazos todo el día, entonces tengo que andar en la fiesta?, expresó con humor Diego Luna, quien en vez de bailar, prefirió pasar la noche charlando con realizadores, productores y escritores españoles.
Un día después, los protagonistas de Sin ton ni Sonia charlaron con los medios de comunicación y deberían de ver sus caras. Ni el maquillaje, ni la ducha les permitió disimular que venían en ?vivo? y que no habían dormido ni un solo minuto. ?La película se terminó con mucho trabajo y estar acá es como una recompensa a la lucha que se puso en concluirla?, comentó Cecilia Suárez.
Juan Manuel Bernal dijo que todo lo que le ha sucedido a Sin ton ni Sonia le recuerda a un final de película gringa: ?es que sufrimos demasiado, pero el final es feliz?. Mariana Gajá, quien en la cinta interpreta a la Sonia del título, confesó que tenían cierto temor porque no sabían si el público español entendería el humor de la película, al que calificó de ?muy mexicano?.
?Fue una gran sorpresa darnos cuenta que la gente se reía demasiado y parece que la gente le entendió más aquí (España), que allá (México)?.
El filme ganador del Premio del Público en la Muestra de Guadalajara narra las historias paralelas de dos parejas aparentemente opuestas, pero que disfrutan los mismos gustos, por lo menos los chicos, ya que ambos están enamorados de la misma mujer. Con cierto humor negro y elementos de thriller, el filme aborda las relaciones de pareja, y los conflictos existenciales.
y la prisa con la que se vive en la ciudad de México, que separa cada vez a los seres humanos.
Yazpik lamentó que haya tan buena fama en el extranjero del cine mexicano, y que no se apoye a esta industria.
?Actores, periodistas y directores de todo el mundo están muy clavados con esta supuesta nueva ola, pero es una lástima que produzcamos tan poco teniendo todo el talento listo para triunfar?. El ex de Rebeca de Alba, comenzará este lunes el rodaje de Sueño gabacho, en donde comparte créditos con Ana Claudia Talancón y John Leguizamo.
Juan Manuel Bernal, quien en noviembre se convertirá en el Don Juan del ?Tenorio? en el Palacio de Bellas Artes, aseguró que la mala racha que atraviesa la producción de cine en el país, se debe combatir con ?la mente en alto y trabajar en donde se pueda?.