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MÉXICO, DF.- La estadounidense Halle Berry, quien por su belleza obtuvo en la década de los ochenta el primer lugar en el concurso Miss América Adolescente y el segundo en Miss América, y por su talento ganó en 2002 el Oscar a la Mejor Actriz por Monster’s Ball, cumple 35 años este 14 de agosto.
Halle María Berry, su nombre completo, nació en 1968 en Cleveland, Ohio, y fue hija de una mujer blanca y un hombre negro, hecho que le provocó muchos problemas durante su niñez.
Cuando apenas tenía cuatro años su padre se marchó de casa y aunque regresó cuando cumplió los ocho, nunca tuvo una buena relación con él, ya que además solía golpearla al igual que a su madre y a su hermana.
Desde muy pequeña tuvo que luchar con su mezcla de razas, toda vez que bebió lidiar con las bromas de sus compañeros de escuela y amigos, blancos y negros; así como con el resentimiento de las chicas debido a su belleza física.
Halle participó en varios concursos de belleza y fue una modelo muy bien cotizada y la prueba es que firmó un contrato multimillonario con una reconocida transnacional de cosméticos, la cual la convirtió en una celebridad a nivel mundial.
Tras su debut en cine en 1991 con The Last Boy Scout, cinta que protagonizara Bruce Willis, en 1992 contrajo matrimonio con la estrella del beisbol David Justice, de quien se divorció en 1997. La actriz ha destacado también en varias series de la pantalla chica como Living Dolls, que inició en 1989, y ganó un premio Emmy además de un Globo de Oro en el apartado de televisión por su intervención en Introducing Dorothy Dandridge (1999). En 2001 se casó con el cantante Eric Benét y en ese mismo año figuró de manera especial en la película Swordfish. La suerte continuaba junto a ella, ya que en 2002 ganó el Oscar como Mejor Actriz por Monster’s Ball.
Entre la filmografía de la joven y bella actriz, que ha pasado a engrosar la lista de las Chicas Bond, se encuentran las cintas: Jungle Fever (1991), Boomerang (1992), Father Hood (1993), The Flintstones (1994), Losing Isaiah (1995), B.A.P.S. (1997), Bulworth (1998), Introducing Dorothy Dabdridge (1999), X-Men (2000), Monster’s Ball (2001) y Die Another Day (2002), entre otras.
Sin “pelo de tontos”
La imagen lo es todo. En ningún otro lugar, este lema es tan válido como en las metrópolis más glamorosas de Estados Unidos. Cuando celebridades de Hollywood como Halle Berry, Demi Moore, Keanu Reeves o Cameron Díaz se preparan para eventos especiales, su cuidada imagen incluye también un peinado deslumbrante.
-Para muchos famosos es impensable tener el cabello en perfectas condiciones sin un peluquero estrella. Entre los astros en ascenso en el cielo de la moda figuran, por lo tanto, cada vez más peluqueros.
-Uno de los preferidos de las celebridades es Robert Cromeans, que a comienzos de esta semana presentó en el congreso Signature Gathering en Las Vegas nuevos peinados y colores para el próximo otoño.
-El evento es considerado el primer barómetro de tendencias antes de la Feria Internacional de Peluquería Cosmoprof North America, en la ciudad del desierto.
-Floyd Kenyatta es considerado un especialista del estilo étnico. En sus 30 años de carrera como estilista, fue creándose un prestigio internacional. Halle Berry y Salma Hayek confían plenamente en sus ideas. La bella morena siempre se preocupa por lucir bien. Por algo es considerada una de las mujeres que más se preocupan por su imagen.
-Beyoncé Knowles aún no figura entre los clientes de Kenyatta. Ella tiene previsto abrir un salón de belleza propio en Londres.
-En peluquerías de Beverly Hills o San Diego, el peluquero estrella Cromeans se ocupa de la cabellera de figuras del pop como Lenny Kravitz y determina lo que se lleva junto con colegas como Frederik Fekkai o Floyd Kenyatta.
-A ellos deben su éxito, por ejemplo, los "rootbooster", una permanente especial que incluso aporta volumen a los finos y rubios cabellos de Meg Ryan.
-Los tiempos en los que alcanzaba con tener un buen peinado ya quedaron atrás, dice Cromeans.
-Actores como Jean-Claude Van Damme, Gwyneth Paltrow, Pierce Brosnan o Ben Affleck pagan hasta 5 mil dólares por pasar por sus manos. Incluso pueden pedir que el peluquero, de 41 años, los visite en su domicilio.
-A partir de 150 dólares, también los estadounidenses comunes pueden cortarse el pelo con Cromeans.
FUENTE:l Agencias