Por María Cecilia Aguilar
El Siglo de Torreón
SAN PEDRO, COAH.- Eran las 6:45 de la madrugada del pasado miércoles, cuando José Edelmiro Delgado Muñoz, comandante del Cuerpo de Bomberos de este municipio, despertó ante el sonido incesante del teléfono. A esas horas, la llamada solamente podría significar una emergencia; así fue, lo necesitaban los elementos que hacían guardia en la estación. Les habían informado que cerca de La Cuchilla se había suscitado un accidente entre un autobús de pasajeros y un trailer, el reporte era desalentador: 9 personas fallecieron instantáneamente en el encontronazo.
El percance se había confirmado en la carretera Torreón-Mazatlán en punto de las 5:15 de la madruga-da, en el camión venían alrededor de 24 personas. Las causas pudieron ser muchas: quizá el conductor manejaba a alta velocidad, tal vez se quedó dormido. Lo único cierto es que las ilusiones, planes y proyectos de los pasajeros, se esfumaron, pues quienes sobrevivieron al accidente, no podrán olvidar lo vivido.
José Edelmiro se dirigió al lugar del accidente.
“Al llegar, lo que vi me dejó mudo. Había muchos cuerpos regados por todos lados”, con un dejo de tristeza recuerda lo vivido, “la sangre que corría por el pavimento se había mezclado ya con el diesel derramado. Los heridos estaban manchados por esta combinación. La escena era terrible, gritos de dolor solicitando auxilio calaban en los oídos”.
Cuando llegó el comandante, ya estaban sus compañeros del Cuerpo de Bomberos, los elementos de la Cruz Roja, de la Dirección de Seguridad Pública y la Policía Federal de Caminos.
“Todos se movilizaban para apoyar a los heridos. Lo primero fue socorrerlos; algunos de los cadáveres ya habían sido rescatados de entre el metal retorcido. Todo se organizó bien, como por inercia, todos sabíamos cuál era nuestra tarea”.
Tanto Bomberos como elementos de la DSPM ayudaron a la Cruz Roja en proporcionar los primeros auxilios.
“Particularmente atendimos a una persona del sexo masculino que apresuradamente se levantó desesperado, caminaba desorbitado, su cara completamente destrozada, no podíamos con él, de pronto se desvaneció. Tenía unas fuerzas tremendas, aventaba manotazos y no se dejaba ayudar, luego sorprendentemente... se nos fue”.
Los médicos de la Cruz Roja le explicaron que algunas personas entran en estado de schok, presentan este cuadro.
El comandante es cuidadoso al argumentar las causas del accidente. Comenta que solamente oyó decir a algunos de los elementos de la Policía Federal que quizá fue porque el chofer dormitó y que el conductor del trailer huyó.
-“El conductor del autobús también pereció en el accidente. Ya había sido sacado su cuerpo de entre los metales. Murió instantáneamente”.
Los heridos presentaban escoriaciones por todo el cuerpo.
“Muy golpeados estaban la mayoría de los sobrevivientes, no creo olvidar los ¡Ayúdenme, me duele, me estoy muriendo!; sobre todo es desgarrador ver una niña de cuatro años llorando desesperadamente buscando a su mamá; ella fue trasladada de inmediato al Hospital General y su estado de salud fue reportado como estable”.
El comandante piensa que el camión transitaba lentamente por la carretera, pero hubiera sido una catástrofe si el trailer hubiera estado estacionado, “pues el impacto hubiera acabado hasta con los sobrevivientes”.
La parte delantera del autobús se desfloró. Los pasajeros que viajaban en esta área en su mayoría fueron los que perecieron.
“Una señora aproximadamente de 40 años de edad que iba adelante del camión quedó prensada, la lámina de una de las paredes del autobús le desgarró los talones, estaba completamente golpeada. Nosotros hicimos todo lo posible por salvarla, pero entró en schock... luego se nos fue..”.
Para las 8:30 los heridos ya habían sido trasladados a los diferentes centros médicos tanto de este municipio como de Torreón.
“Como a las 10:00 de la mañana nosotros terminamos y una vez que la Policía Federal de Caminos trasladó tanto el camión como el trailer, lavamos la carretera hasta quitar la sangre y el diesel derramado en el pavimento, debía quedar limpio para evitar otro fatal accidente... para evitar otras malas noticias...”.