TORREÓN, COAH.- Uno de los homicidios que hasta el momento no ha podido ser esclarecido por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), es el referente a Esteban Blanco López, quien murió a consecuencia de la golpiza que le propinaron varios sujetos la madrugada del 3 de agosto en la colonia Vencedora. Un puntapié le “clavó” la nariz en el cerebro.
Según informes de la citada dependencia, el asesinato de Blanco López es uno de los que aún no han sido resueltos, por lo que quedará en el archivo de los rezagados, hasta en tanto se reactiven las investigaciones al respecto.
Según la averiguación del caso, el occiso fue victimado a golpes y botellazos, la madrugada del sábado 3 de agosto, cuando en compañía de otro individuo que acababa de conocer en una cantina y que resultó lesionado, fueron asaltados por cuarto desconocidos pero como no traían dinero se desquitaron propinándoles una paliza.
A las 03:33 horas Sala de Radio dio indicaciones a una patrulla de Seguridad Pública para que se trasladara a la prolongación Colón frente al domicilio marcado con el número 62 de la colonia Vencedora, ya que se reportaba una riña.
Al llegar al citado lugar, el cuerpo de una persona del sexo masculino estaba tendido en el suelo y los socorristas de la Cruz Roja informaron que ya no se le percibían signos vitales, por lo que se dio aviso al Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, a cargo entonces de Nora Élida Solís González.
El cadáver presentó policontusiones, además de varias heridas cortantes en rostro y cabeza, producto de los botellazos propinados, estimando que la causa de su deceso fue por probable traumatismo craneoencefálico, lo que posteriormente la necropsia señaló que fue por ahogarse en su propia sangre cuando de un puntapié, le “clavaron” la nariz en el cerebro.
En ese mismo sitio se halló Juan Bernardo Villa Carrillo, de 18 años de edad, con casa en Bermejillo, Dgo., y domicilio provisional en esta ciudad en calle 17 No. 857 colonia Centro, a quien se le apreciaron contusiones en diferentes partes del cuerpo, así como 3 heridas cortantes en la región occipital, un golpe en el pómulo derecho y otra herida cortante en la oreja derecha.
Esta persona manifestó que conoció al occiso un par de horas antes de su homicidio, en la cantina denominada Madonna’s, ubicada en calzada Cuauhtémoc esquina con avenida Zacatecas, en la que estuvieron tomando varias cervezas.
A eso de las 03:00 horas, el occiso, del cual no sabía su nombre, lo invitó al domicilio de Prolongación Colón No. 62 de la Vencedora, para presentarle a su novia, por lo que se dirigieron a ese lugar.
Cuando llegaron a la dirección citada, cuatro desconocidos les salieron al paso con intenciones de asaltarlos, pero como ya no traían dinero, se desquitaron golpeándolos de manera salvaje, utilizando para ello varias botellas de cerveza que llevaban así como sus puños y pies, dejándolos tendidos en el suelo una vez que descargaron su enojo, perdiéndose en la oscuridad de la noche.
Agentes ministeriales lograron la localización de varios testigos, cuyo testimonio se asentó en la averiguación previa penal que se integró y que hasta la fecha, luego de cuatro meses, no ha podido ser concluida porque no se cuenta con ningún sospechoso o presunto responsable.