09 octubre 2003
Caracas, (EFE).- Tres días después de criticar duramente a la OEA, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, será hoy anfitrión del secretario general de ese organismo, César Gaviria, en una reunión continental sobre pobreza, equidad y exclusión.
Chávez calificó este domingo de "imbéciles" y "cómplice de delincuentes" a la Organización de Estados Americanos (OEA) y otras instancias internacionales que condenaron la incautación de equipos a un canal de televisión opositor, sin considerar que la medida estaba ajustada a derecho, recalcó.
En febrero pasado, Chávez ya había recriminado públicamente a Gaviria por emitir declaraciones "fuera de lugar" a favor de un dirigente empresarial venezolano detenido y, al igual que ahora, subrayó que esos son asuntos de exclusiva incumbencia de su país.
Diplomáticos de países de la OEA en Caracas confesaron que sienten zozobra ante la posibilidad de que Chávez critique nuevamente a Gaviria de manera pública y que desciendan así a un plano secundario los temas de la cita continental.
El encuentro se celebrará hasta el viernes en Porlamar, ciudad de la isla caribeña de Margarita, donde recientemente estuvieron previstas otros citas internacionales finalmente suspendidas por la crispación política venezolana.
Gaviria ha jugado un papel central como "facilitador" de diálogos políticos entre el Gobierno de Chávez y sus detractores, y en mayo último puso fin a siete meses de presencia intermitente en Caracas, donde en más de una ocasión figuró entre las víctimas de los ácidos intercambios de fuego verbales.
Antes de dejar Washington con rumbo a Margarita, Gaviria evitó el martes aludir a la crisis venezolana y se centró en la cita. "Hoy más que nunca el esfuerzo multilateral se hace necesario para luchar contra el flagelo de la pobreza y la desigualdad", declaró el secretario de la OEA.
Gaviria llegará junto al uruguayo Enrique Iglesias, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que financia buena parte de los proyectos nacionales contra la pobreza y exclusión.
El embajador de Venezuela ante la OEA, Jorge Valero, admitió recientemente en Washington que en Margarita no se aprobará ningún instrumento con fuerza ejecutoria, porque los asistentes no pueden suplantar facultades restringidas a los cancilleres del continente.
Recalcó, no obstante, que "de allí saldrán bases para la lucha contra la pobreza, que es un elemento social que perturba la gobernabilidad de las naciones", que estarán contenidas en una declaración final prevista para el viernes próximo.
Ya en Venezuela, Valero dijo este martes, sin aludir a Gaviria, que los 34 países de la OEA mandarán representantes a la cita y que, sumados a los de otros de entes nacionales e internacionales, sumarán unas 200 las personas que se darán cita en Margarita.
La agenda de Margarita comenzará por diagnosticar el papel de la OEA para encarar los desafíos de la pobreza y la crisis económica y continuará con un análisis de los avances y las implicaciones de las metodologías para medir la pobreza y la inequidad.
También está previsto un balance sobre los resultados de las estrategias para reducir los déficit sociales, especialmente los de las mujeres, los niños, los indígenas y los mayores.
La coordinación y el apoyo mutuo de los países en la consecución de los objetivos de desarrollo y justicia social de la región y la generación de estrategias para fortalecer la Comisión Interamericana de Desarrollo Social y el Programa Interamericano de Combate a la Pobreza y la Discriminación también figura en la agenda.