Es urgente que se llegue a un acuerdo para definir la dirigencia oficial del Sindicato de los Tres Poderes del estado y así terminar con la incertidumbre en que se encuentran cientos de burócratas estatales, dijo ayer Sergio Quiñónez Castrellón.
En el conflicto del Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Tres Poderes del Estado solamente resta que el Tribunal de Conciliación y Arbitraje reconozca o no el voto a la mayoría de los burócratas que emitieron su voluntad a través del sufragio para designar a su nueva dirigencia y no permitir que se trate de hacer la imposición de Beatriz Rodríguez a través de Raquel Reyes.
Lo anterior fue manifestado por Sergio Quiñones Castrellón, uno de los contendientes a dirigir dicho sindicato, manifestando que una vez que se han agotado todos los procedimientos legales, es hora de que el tribunal decida al respecto y defina quién tiene la mayoría de las preferencias dentro de los trabajadores al servicio del estado.
En entrevista concedida a El Siglo de Durango, Quiñones Castrellón señala que comienza a registrarse cierta desesperación por parte de la mayoría de los trabajadores burócratas, quienes observan que a más de mes y medio en que se realizó una elección se demostró con hechos y públicamente por quien votó la gran mayoría de los afiliados al Sindicato de los Tres Poderes.
Puso como ejemplo el caso del grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, donde por decisión de la mayoría se acordó remover a la coordinadora de los mismos y designar un nuevo representante; el caso más reciente fue el proceso interno del PRI en la entidad para elegir su candidato a gobernador, donde se impuso la democracia y se respetó la voluntad de la mayoría, aunque la diferencia haya sido mínima.
En este sentido, indicó que es increíble que las autoridades se nieguen a aceptar y reconocer a quien obtuvo la gran mayoría de los votos en el proceso interno del Sindicato de los Tres Poderes.
Es muy cómoda la posición que ha asumido el presidente del tribunal, Guillermo Cervantes Perales, al decir que tienen que decidir los órganos internos del sindicato la solución a este conflicto.
Haciendo caso de sus recomendaciones, primeramente se debe tomar en cuenta que el pasado 8 de noviembre terminó el periodo estatutario de Raquel Reyes Bretado y como consecuencia ya no tiene ninguna representatividad.
De la misma manera, siguiendo los cauces legales, se convocó a través del órgano facultado, como es el presidente de la Comisión Estatal de Vigilancia, Enrique Cabada, a una asamblea en donde se ratificó el resultado que le da el triunfo a Sergio Quiñones Castrellón; sin embargo, el tribunal aún no se decide a reconocer dicho Comité Ejecutivo.
En este sentido, el declarante manifiesta que la posición de Raquel Reyes y de Beatriz Rodríguez, de rehusarse a reconocer que no tienen la mayoría a su favor, es porque seguramente tienen miedo de que se les pidan cuentas claras con relación al fondo para el retiro de los trabajadores, que representa cantidades importantes de dinero, del cual al parecer no existe nada, ya que desde el 20 de marzo del 2001 se les está demandando esta información y no pueden dar a conocer nada.
Asimismo, los dos amparos que promovieron en contra del Tribunal de Conciliación y Arbitraje, como una medida de presión y darle largas al asunto, les fueron negados ya por la autoridad judicial correspondiente.
En este sentido, Quiñones Castrellón reconoció que la planilla de Beatriz Rodríguez es la oficial por parte del patrón, que en este caso es el Gobierno del Estado, con el cual no están peleados.
Por el contrario. es importante llegar a acuerdos de manera conjunta para eficientar el trabajo y la relación, pero señaló que existe la presunción de que el Secretario de Finanzas se encontraba detrás de dicho grupo.
Al ser cuestionado sobre los compromisos que se hicieron a través de la Secretaría General de Gobierno con él para que se calmaran las cosas, después del enfrentamiento suscitado en noviembre, cuando un grupo de simpatizantes de su planilla trató de sacar del sindicato a Beatriz Rodríguez y demás seguidores.
Enfatizó que la promesa fue en el sentido de que habría una tercera elección, donde se respetaría la decisión de la mayoría, pero quienes no cumplieron fueron Raquel Reyes y Beatriz Rodríguez, quienes después rechazaron cualquier nueva convocatoria, tratando de imponerse de manera autoritaria.
La situación es que el pasado mes de noviembre ya se tuvo un escenario que refleja lo que puede pasar si las autoridades no reconocen a quien obtuvo la mayoría, por lo que podría generarse un problema mayor.
- El Tribunal de Conciliación y Arbitraje debe definir si reconocerá a quien tiene la mayoría para el Sindicato de los Tres Poderes.
- Existe inconformidad de los trabajadores burócratas por esta falta de decisión.
- Pretenden imponer a la candidata oficial del Gobierno, Beatriz Rodríguez.
- Al parecer existe miedo de la anterior dirigente, Raquel Reyes, de que le hagan una auditoría al fondo de retiro de los trabajadores.
- Existe la Ley de Responsabilidades en caso de que no emita ningún juicio el titular del tribunal.
- Hay el riesgo de que puedan desbordarse los ánimos, como ya ocurrió el pasado mes de noviembre y será responsabilidad de las autoridades.
FUENTE: Sergio Quiñones Castrellón, secretario electo del Sindicato de los Tres Poderes.