Mientras se mantiene la polémica por la vigencia del Tratado del Libre Comercio en el ramo agropecuario, el estado de Durango registró un índice del 4.4 por ciento de siniestrabilidad agrícola durante las siembras realizadas en el 2002, según lo reveló un informe estadístico de la delegación de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación.
De acuerdo a los datos obtenidos, en el ejercicio del 2002 la actividad agrícola en el territorio estatal se tradujo en la siembra de 676 mil 222 mil hectáreas distribuidas en cuatro ciclos: otoño-invierno con una superficie de 14 mil 638 hectáreas, 610 mil 064 en el primavera-verano y 51 mil 520 hectáreas en la modalidad de perennes.
De la mencionada superficie sembrada, 30 mil 164 hectáreas resultaron siniestradas por cuestiones climatológicas como el granizo y el arrazamiento. De hecho, el ciclo más afectado por cuestiones de siniestros fue el primavera-verano con 29 mil 831 hectáreas, mientras que en el otoño-invierno sólo fueron afectadas 333 hectáreas, asentó el informe de la delegación local de la Sagarpa.
Según los datos oficiales, de las 676 mil hectáreas que en promedio se siembran anualmente en el estado, el 84.1 por ciento de esta superficie agrícola se trabaja en la modalidad de temporal, es decir, queda sujeta a las condiciones climatológicas que se presentan año con año.
En el 2002 las precipitaciones pluviales fueron abundantes al inicio del ciclo agrícola, de tal manera que se alcanzó una acumulación de 497 milímetros, que corresponden al 93.6 por ciento de la media histórica en la entidad.
Mientras que en la modalidad de riego se trabajan 106 mil 911 hectáreas, es decir, el 15.9 por ciento; 13 mil 791 hectáreas en el ciclo otoño-invierno, 51 mil 291 hectáreas en el primavera-verano y 41 mil 829 en los ciclos perennes.