Por Socorro Muñoz YáÑez
El Siglo de Torreón
MONTERREY, NL.- Es irreversible la integración económica y social que está viviendo el noreste de México y el sur de Estados Unidos, con esto, se fortalece más el concepto de regionalización dentro del esquema global.
Los resultados muestran que las economías fronterizas del sur de Texas se ven impactadas por los movimientos del tipo de cambio peso-dólar, y de igual forma, El Paso Texas es más sensitiva al comportamiento de la industria maquiladora, reconocieron funcionarios del Banco de México y de la Reserva Federal de Dallas.
Keith R. Phillips, analista del Banco de la Reserva Federal de Dallas aseguró que la frontera Texas-México es una región de rápido crecimiento, caracterizada por una compleja mezcla de culturas, idiomas y costumbres. Destacó que es una región (Sur de Estados Unidos y Noreste de México) cambiante que se ha venido beneficiando con la expansión poblacional del norte del país y el crecimiento comercial de México-Estados Unidos.
El expositor participó en un foro organizado por la delegación noreste del Banco de México. El analista de la Reserva Federal de Dallas destacó que las expectativas económicas de esta región son moderadas, siempre y cuando el peso se mantenga fuerte y no muestre deslizamientos significativos en su valor.
Favorece a la eficiencia económica
En tanto, Agustín Del Río, delegado regional del Banco de México en el noreste, reconoció que existe una región común, ligada principalmente a la industria maquiladora y al desplazamiento de factores productivos.
Precisó que ?tenemos una serie de interacciones que son complementarias, todo esto nos lleva a un mayor intercambio de factores de producción, esto aumenta la eficiencia de las economías?.
Sin embargo reconoció que actualmente las condiciones internacionales no favorecen al crecimiento regional, ?hemos pasado momentos muy críticos que redujeron el gasto de inversión y de consumo en Estados Unidos, sin embargo, a través de una Política Monetaria Expansiva?.