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WASHINGTON, EU.- Los expertos de la ONU registraron ayer más sitios en Iraq, en búsqueda de armas de exterminio masivo, mientras Estados Unidos ordenaba el envío de 35 mil efectivos más al Golfo para una posible guerra.
El organismo de supervisión nuclear de la ONU, que supervisa las inspecciones de armas, ha llamado a Estados Unidos a suministrar más información específica de inteligencia para ayudar en la búsqueda de armas de exterminio masivo.
El llamado lo realizó el pasado viernes Mohamed ElBaradei, jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), mientras que funcionarios de alto rango en Europa se pronunciaron en contra de apresurarse a una guerra sobre la base de inspecciones de armas inconclusas.
“Sin pruebas, sería muy difícil comenzar una guerra”, dijo el coordinador de política exterior de la Unión Europea, Javier Solana.
La orden del secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, de enviar a miles de tropas más al Golfo fue la más importante desde que el Pentágono comenzara en las últimas semanas a incrementar las tropas y fuerzas en la región.
El objetivo es duplicar a los 60 mil soldados presentes actualmente en la región del Golfo mientras el presidente George W. Bush decide si ordenar o no una invasión a Iraq por su supuesta posesión de armas de exterminio masivo.
ElBaradei se reunió con la consejera de seguridad nacional, Condoleezza Rice, en la Casa Blanca y después en el Departamento de Estado con el secretario de Estado, Colin Powell.
Los encuentros se produjeron un día después de que ElBaradei y su colega Hans Blix, jefe de la Comisión de Supervisión, Verificación e Inspección de la ONU (UNMOVIC), dijeran al Consejo de Seguridad de la ONU que no había “pruebas contundentes” que demostraran que Iraq tenía armas químicas, biológicas o nucleares.
Iraq niega tener cualquier tipo de arma prohibida. Pero Washington dice que no es así y que si Iraq sigue mintiendo, estaría de nuevo en “violación sustancial” de las resoluciones del Consejo, un lenguaje que podría significar la guerra.
“Necesitamos más información procesable” dijo ElBaradei a periodistas en Washington después de informar a miembros del Congreso.
“Tenemos un buen proceso de diálogo con Estados Unidos y con servicios de inteligencia de otros países y espero que en las semanas próximas se intensifique y podamos obtener información adicional que acelere nuestro trabajo en el campo”, agregó.
Las autoridades iraquíes dijeron que equipos de la UNMOVIC se dirigieron a dos compañías de medicinas y equipos médicos en la capital, y otra a un lugar no revelado en el norte de Bagdad.
Expertos en mísiles visitaron la instalación Ibn Seena en Tarmiyah, al norte de Bagdad. Un equipo de OIEA fue al sitio al-Amiriyah en Falluja.
El primer ministro turco, Abdullah Gul, llegó ayer a Arabia Saudita para conversaciones sobre la crisis entre su vecino común, Iraq, y su aliado clave, Estados Unidos.
Antes de dirigirse a Riyad, Gul le dijo a periodistas en Ankara que todos los países en la región debían hacer lo máximo para evitar una guerra.
“Somos un país de la región, y uno de los países que sufrirá más (en caso de una guerra)”, declaró. “Saldremos beneficiados si la crisis termina sin una guerra. Para ser capaces de lograr esto, cada país en la región tiene una responsabilidad, pero la mayor responsabilidad es de Iraq”.
Arabia Saudita y Turquía se han opuesto públicamente a una guerra contra Iraq y hasta ahora ambos países no le han dado permiso a Washington para que use bases en su territorio con el fin de lanzar ataques militares.
Las fuerzas terrestres estadounidenses que han recibido órdenes de dirigirse a la región son inferiores a las más de 250 mil enviadas durante la Guerra del Golfo de 1991, pero podrían aumentar rápidamente en el resto del mes de enero y en febrero.