TORREÓN, COAH.- El dirigente local de la burocracia federal, Óscar del Bosque, calificó de bajo el aumento otorgado al salario de los trabajadores al servicio del estado –5.5 por ciento--, y aunque se trata de favorecer más a los que menos ganan, el poder adquisitivo de los empleados sindicalizados del gobierno seguirá débil.
Como es del conocimiento público, la representación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la dirigencia de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), acordaron aumentos del 3.7 por ciento a los trabajadores sindicalizados con sueldos considerados elevados y del 5.5 por ciento a quienes menos ganan –trabajadores operativos--.
Óscar del Bosque reconoció que la situación para la burocracia federal de La Laguna se complica y es parte del problema económico que vive el país; muchos trabajadores al servicio del Estado continuarán desarrollando todo tipo de actividades fuera de su horario laboral, con el fin de llevar más dinero a sus casas y mantener el sostenimiento familiar.
El aumento concedido por el Gobierno Federal, debe hacer pensar a los burócratas federales, ahora que se empezó a promover nuevamente el llamado Retiro Voluntario con el cual se pretende adelgazar al máximo la nómina federal.
Dicha acción de retiro no es más que un espejismo con el que se pretende convencer a los burócratas, muchos de los cuales ahora con el nuevo aumento, no sólo tendrán la necesidad de conservar el trabajo, sino de, aunado a la labor diaria, buscar otras alternativas de sostenimiento familiar.
¿Adelgazamiento o desaparición?
Para el ex secretario general de la FSTSE en La Laguna, Alfonso Barrón García, el aumento del 5.5 por ciento significa una burla: “Es parte de los ataques de los que ha sido objeto la burocracia federal y queda claro el propósito del Ejecutivo de la nación de desaparecer el sindicalismo”.
El salario promedio de un burócrata federal es de cuatro mil 500 pesos mensuales, de ahí que dicho aumento no significa nada, la percepción no permite a los burócratas atender las necesidades principales de alimentación, vestido y ratos de esparcimiento, por ello, muchos tienen la obligación y necesidad de salir a buscar otras opciones de ganancias.
El también ex dirigente nacional de los trabajadores de Telecomunicaciones de México, auguró tiempos más difíciles con las represalias que inminentemente adoptará Estados Unidos en contra de nuestro país y ahora el error más grave que puede cometer cualquier trabajador es renunciar a su empleo “fantaseando” con que saldrá de sus deudas con su liquidación y pondrá un negocio que le permitirá vivir bien.
Muchos de los que se han apegado al retiro voluntario, a los dos o tres meses andan buscando trabajo porque el dinero ya se les terminó y su condición no es nada envidiable, de ahí que deben pensar primero antes de decidir si se apegan a la renuncia voluntaria.
Prevalece el “maridaje”
Por su parte, Sergio Esteban Pérez, ex secretario general de Trabajadores de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), consideró que el aumento otorgado es muestra del entendimiento que siempre ha existido entre el Gobierno Federal y la Federación.
Se mantiene el control, pues todo mundo sabe que el 5.5 por ciento no ayuda en nada a los burócratas federales.
Por otra parte, mencionó que el pésimo servicio médico que tiene el burócrata en el ISSSTE, significa gastos mayores, pues muy pocos acuden a la clínica cuando están enfermos y eso también representa gastos. El panorama para los burócratas federales es desalentador, concluyó.