02 de diciembre de 2003
Caracas, (EFE).- Las 3,6 millones de firmas que la oposición aseguró hoy recabó en demanda de un referendo revocatorio del mandato de Hugo Chávez, es aún insuficiente para forzar el fin de su Gobierno en una consulta popular de realización aún incierta.
De confirmarse la validez de todas estas firmas "antichavistas" y descartarse el "megafraude opositor" denunciado por Chávez, ellas no alcanzan la votación de 3,75 millones que obtuvo el gobernante en el 2000, número que en el referendo debe ser al menos igualado para provocar el fin del Gobierno y un llamado a elecciones anticipadas.
La oposición tiene, no obstante, al menos un trimestre para buscar los 150.000 electores que le faltarían en su empeño, pero, a la par, deberá defenderse en ese lapso de acusaciones gubernamentales de que buena parte de las firmas recabadas contra Chávez son falsas.
La misma acusación afrontan las firmas de 2,6 millones de personas que el Gobierno asegura, a su vez, haber recabado poco antes en demanda de otros referendos contra diputados opositores.
El directivo electoral Jorge Rodríguez advirtió que no hay que fiarse de ninguna de esas cifras y que la única válida será la que en enero ofrecerá el autónomo Consejo Nacional Electoral (CNE).
"El CNE los espera en la bajadita", agregó refiriéndose a que el número oficial ridiculizará a los de la oposición y a los del Gobierno que no estén ajustados a la realidad.
Las cifras del CNE se darán a conocer una vez que depure y anule las firmas duplicadas y falsificadas y otras que no reúnan otros requisitos, y recién entonces se sabrá contra cuáles autoridades se convocarán referendos revocatorios de sus mandatos, y en qué fechas.
El requerido 20 por ciento del electorado para activar referendos equivale a 2,4 millones en el caso de Chávez, sobre el universo electoral nacional de 12 millones de personas.
Tras revelar este martes la cifra "antichavista" de 3,6 millones, el líder opositor Enrique Mendoza pidió al CNE que sea imparcial al evaluar la validez de esas firmas recabadas hasta el pasado lunes. "Sólo les pedimos que sean imparciales, transparentes y respetuosos de la voluntad mayoritaria de los venezolanos", indicó.
También dijo que el pueblo opositor "ha sido paciente" aceptando la anulación de dos "firmazos" anteriores con el mismo fin, frustrados por diversos motivos en los últimos nueve meses.
En esta oportunidad, añadió, "se defenderán las firmas en todos los ámbitos de la actuación ciudadana". "Que no se confunda la paciencia con la debilidad, el respeto con la sumisión ni la nobleza con la cobardía", advirtió.
Pocos minutos después de la intervención de Mendoza, el ministro de Infraestructura, Diosdado Cabello, reiteró que la oposición "hizo trampa" y que, pese a ello, no logró el mínimo que buscaba de 2,4 millones de firmas.
"No tenemos ninguna duda de que la oposición no alcanzó el número de firmas que necesitaba. Otra cosa es que salgan diciendo cualquier cifra. Hoy (el diario) El Nacional da la orden de decir que fueron 3,8 millones de firmas; los van a regañar", señaló Cabello.
Aclaró, no obstante, como ayer ya lo hizo José Vicente Rangel, el vicepresidente del país, que "el Gobierno aceptará la cifra" de 3,6 millones si el CNE llegase a convalidarlas.
De no haberse reunido las firmas necesarias, Chávez se mantendrá en la Presidencia hasta las elecciones de finales de 2006, en las que ya ha anunciado que buscará su tercera reelección consecutiva para gobernar hasta el 2013, ya que antes de su elección para el actual período 2000-2006 tuvo un mandato entre 1999 y 2000.