TORREÓN, COAHUILA.- En Coahuila 45 de cada 100 jóvenes o adultos mayores de 15 años no han iniciado o concluido su educación básica, unas 681 mil 475 personas, informó Mirna Beatriz Rodríguez Ramírez, coordinadora del Instituto Estatal de Educación para Adultos (IEEA).
Añadió que cuatro de cada 100 no sabe leer, ni escribir –59 mil personas—, ubicándose la mayoría en zonas rurales o dispersas y 15 de cada 100 no concluyó la primaria –224 mil personas—, la mayoría de esta población se localiza por arriba de los 45 años de edad.
El problema mayor de rezago educativo en nuestra entidad, agregó Rodríguez Ramírez, se detecta en el nivel de secundaria en el que la deserción es elevada y las estadísticas indican que 26 de cada 100 jóvenes o adultos mayores de 15 años no concluyó estos estudios –unas 398 mil personas—, la mayoría de las cuales es de poblaciones urbanas y el 37 por ciento de los mismos tiene entre 15 y 29 años de edad –152 mil jóvenes—.
La Coordinadora del IEEA mencionó que tomando en cuenta que uno de los retos del instituto es ampliar la cobertura de los servicios de la educación para adultos, se han planteado cuatro ejes rectores que llevarán a un eficiente cumplimiento de las metas fijadas para el presente año.
Explicó que el primer eje es establecer puntos de encuentro como un espacio imprescindible en cada micro región, el segundo marca la formación al personal operativo, el tercero donde se definen las estructuras operativas regionales y municipales y en el cuarto se involucra la tecnología en la educación para adultos.
La labor mayor está en las secundarias, sin embargo en este nivel educativo se detecta que la mayoría de los que deciden abandonar sus estudios es por cuestiones económicas, para incluirse en el campo laboral y poder contribuir el sostenimiento de la familia.
¿Y la educación gratuita?
Edmundo Meraz Ateca, profesor de educación básica durante 47 años, cuestiona la educación gratuita y añade que éste también es un factor promotor del rezago educativo, pues muchos niños y jóvenes abandonan la escuela porque sencillamente no tienen dinero.
En el próximo inicio de clases, se podrá observar la problemática en las instituciones educativas, diferencias entre padres de familia y directores que condicionan el servicio y hasta se lo niegan a quienes no pagan la inscripción, cuota de recuperación o bono, como le llamen ahora al registro del alumno.
En secundarias el pago rebasa hasta los 450 pesos, cantidad que para muchos padres desempleados es difícil conseguir, sin embargo este pago sólo se refiere al registro del alumno, pues faltaría el uniforme, útiles escolares y demás, de tal forma que el rezago también se agrava a consecuencia del problema económico que padecen miles de familias, estimó.