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Interpretaciones del silencio / La justicia en el gobierno de Vicente Fox

Dos de los asuntos escogidos para publicar en nuestra edición del 21 de octubre de 2003, que estrenó el nuevo diseño de Diario de Yucatán, fueron sendas entrevistas con el presidente Vicente Fox Quesada y su esposa Martha Sahagún Jiménez. Las entrevistas fueron solicitadas por conducto de Oscar Navarro Arias, director de la oficina de la Asociación de Editores de los Estados en la ciudad de México, al señor Alfonso Durazo Montaño, vocero oficial de la Presidencia y secretario particular del señor Fox. La señora Sahagún Jiménez aceptó responder a las preguntas que le remitiéramos por correo electrónico, mismas que publicamos, con sus respuestas, en la edición del 21 de octubre. No se nos ha concedido la entrevista con el Presidente, en la cual, según lista que anticipadamente se le entregó al señor Durazo, nos proponemos someter a su consideración los siguientes asuntos:

El diez de marzo de 2003, en la residencia presidencial de Los Pinos, ante representantes de los 16 periódicos de la Asociación de Editores de los Estados, Diario de Yucatán, planteó al coordinador general de Comunicación Social de la Presidencia de la República, Rodolfo Elizondo Torres, denuncias que afectan al Gobierno Federal en el asunto judicial conocido como caso Medina Abraham.

1) Diario de Yucatán solicitó que el presidente Vicente Fox Quesada disponga, como jefe nato del Ejército, una investigación de las publicadas denuncias, ni desmentidas ni contestadas, de que generales del Ejército impidieron que un perito de las fuerzas armadas presentara un dictamen que demuestra la inocencia del acusado Armando Medina Millet. ¿Por qué el presidente Fox guarda silencio sobre esta solicitada investigación?

2) Diario de Yucatán solicitó que el presidente Fox disponga una investigación de las denuncias publicadas en los años 2001, 2002 y 2003, nunca desmentidas ni contestadas, sobre las intervenciones de funcionarios y agentes de la Procuraduría General de la República para fabricar un falso expediente de homicidio contra Armando Medina Millet. ¿Por qué el presidente Fox guarda silencio sobre esta solicitada investigación?

3) Diario de Yucatán solicitó que el presidente Fox disponga una investigación sobre las publicadas denuncias, nunca desmentidas ni contestadas, de que el Dr. Eduardo González Mata, como jefe de peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal primero y como jefe de peritos de la Procuraduría General de Justicia de la República después, fue el organizador y director del expediente fraudulento en que se basó la sentencia de homicidio dictada contra Armando Medina Millet. ¿Por qué el presidente Fox guarda silencio sobre esta solicitada investigación?

4) El Dr. González Mata fue destituido en abril de 2001 como jefe de peritos de la Procuraduría General de la República, después de ser acusado de la fabricación y venta de peritajes y dictámenes falsos para favorecer a narcotraficantes y otros delincuentes, entre otros actos de corrupción cometidos en el desempeño de su cargo. Diario de Yucatán denunció el 14 de septiembre de 2003 que el Dr. González Mata fue designado jefe de la Policía Federal Preventiva en el Estado de Chiapas. ¿Por qué el presidente Fox también guarda silencio sobre este nombramiento federal expedido a favor de un funcionario destituido por corrupción?

5) Con una selección de 60 reportajes y editoriales publicados en 2001, 2002 y 2003, entregados en tres carpetas al señor Elizondo Torres, Diario de Yucatán expone y fundamenta su conclusión, nunca desmentida ni contestada, de que una mafia de intereses políticos, económicos, judiciales, militares y religiosos, infiltrada en altas esferas del Gobierno Federal, se ha confabulado con una campaña de desinformación y mentiras, tanto en Yucatán como en la ciudad de México, que busca ocultar la verdad en el caso Medina Abraham y ha ocasionado ya conflictos entre los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Yucatán. ¿Por qué el presidente Fox guarda silencio sobre esta denuncia pública? ¿Cómo deben interpretar los mexicanos que el Presidente de la República se quede callado tres años frente a denuncias públicas formuladas contra su gobierno?

Alfonso Durazo Montaño substituyó a Rodolfo Elizondo Torres como vocero oficial de la Presidencia en ceremonia que se efectuó en la sala de prensa de Los Pinos el 29 de julio 2003. Durante el acto, Durazo Montaño se comprometió a "impulsar un sistema de información gubernamental abierto y una política de comunicación social respetuosa y activa". "Estoy convencido -dijo el señor Durazo en esa ocasión- de que el SILENCIO institucional es la mayor fuente del rumor político y de que toda acción comunicativa del gobierno debe estar libre de suspicacias". El persistente SILENCIO que guarda Vicente Fox alimenta los rumores de que su postulación a la Presidencia o su triunfo en las elecciones estuvieron sujetos a compromisos o condiciones que lo atan a la corrupción y le impiden cumplir como gobernante las promesas de rectitud política, integridad moral y saneamiento de la administración de justicia que hizo como candidato. Un SILENCIO que tiende a poner al señor Fox al margen o en contra de los esfuerzos de los mexicanos de buena fe que cifraron en él sus esperanzas de que la Presidencia de la República regresara a la lucha por el imperio de la verdad, la ley y los derechos humanos. Un SILENCIO que tiende a privar a nuestros funcionarios públicos del buen ejemplo, tan necesitado por ellos, de un Presidente que se preocupa por el cuidado del buen nombre de su persona y sus colaboradores. Se ha nutrido así la suspicacia de que los éxitos que el gobierno del señor Fox ha obtenido en la persecución y castigo del delito obedecen a un criterio selectivo que le da libertad de acción siempre y cuando no afecte a la mafia y sus protegidos. Y entre estos "rumores" continúa viva la sospecha de que Yucatán sigue siendo una pieza de negociación en los estiras y encoges de las transacciones secretas que se pactan, en la sede de los poderes federales, para conciliar intereses de muy diverso signo, pero ajenos al pueblo mexicano. Si el señor Durazo sabe de otra interpretación que pueda tener el silencio del Presidente, estas columnas quedan a su disposición para que Diario de Yucatán las publique.

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