MÉXICO, DF.- Focos rojos en el arbitraje del futbol mexicano. El Consejo Nacional, órgano máximo de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), intervendrá ya en asuntos de silbantes, a raíz de las suspicacias en torno al trabajo que Felipe Ramos Rizo realizó en el Cruz Azul-Jaguares, penúltimo partido de la temporada pasada, en el que los chiapanecos ganaron 1-0 y casi amarraron su salvación.
Ese y otros enredos arbitrales obligaron a los federativos a tomar cartas en el asunto.
La semana pasada Víctor Garcés, presidente del máximo circuito, había dicho que el Consejo Nacional sólo se inmiscuiría en el tema "si el torneo de liga estuviera amenazado".
Ya lo hizo...
Salieron a la luz sospechas de soborno, mismas que de inmediato se ligaron a las diferencias personales de Ramos Rizo con Edgardo Codesal, presidente de la Comisión de Arbitraje.
Ayer por la mañana, el árbitro mundialista recibió una llamada de Garcés, en la que el directivo le solicitó silencio sobre el tópico: ni una palabra más.
"Si tiene papeles que aclaren la situación, preséntelos el lunes", le pidió el dirigente.
Habrá fuego en la FMF...
"Alguien filtró ese chisme y quien haya sido debe acusarme en mi cara y quedar al descubierto y sin máscaras", dijo Felipe, quien incluso debió suspender una conferencia de prensa que había programado para hoy.
-¿La tormenta tendrá relación con tus problemas con Codesal? -No sé si venga de ahí, pero el lunes saldrá el culpable.
El nazareno pasó este día entre documentos y notarios públicos: alistó todas las pruebas que presentará al Consejo, principalmente las relacionadas con un depósito bancario de 250 mil pesos que, según Ramos Rizo, se originó por la venta de un departamento de su propiedad (lo que ocurrió en febrero pasado y no en una fecha cercana al diez de mayo, día del controvertido cotejo).
"Mostraré copias certificadas de mis papeles: escrituras, contrato de compra-venta en el que especifiqué a quién le vendí el departamento, cuándo y además la fecha del depósito. Voy a salir limpio de esto, se aclarará a mi favor".
¿De dónde surgió la versión? Juan José Arrese, en su momento director deportivo de Colibríes (equipo que finalmente descendió), se aferró a las sospechas: "Creo que el señor Ramos Rizo no tiene la conciencia tranquila, pero pruebas no tengo ni puedo acusar a nadie. Yo no filtré ninguna noticia".
¿Fue entonces Codesal, quien en el seno arbitral prometió que le "cortaría la cabeza a Ramos Rizo" porque se le "hacía sombra"? Más allá de este caso, hay otros por investigar...
¿Cuál es la causa de fondo del distanciamiento entre Codesal y Ramos Rizo?, ¿es cierto que Felipe comenzó a orquestar una campaña para apoderarse a mediano plazo de la Comisión de Arbitraje?, ¿por qué fue despedido, entre otros ex nazarenos, Miguel Ramos Rizo, hermano de Felipe?, ¿cuál es la causa de que el auxiliar Rafael Herrera -amigo de los Ramos Rizo y considerado en su momento uno de los mejores abanderados de México- se mantenga sin acción?, ¿qué hay de la venta de uniformes al inicio de campaña con un costo muy elevado al promedio? La realidad indica que el prestigio de Felipe Ramos Rizo iba en aumento, no sólo por sus buenas actuaciones en la cancha, sino por sus estrechas relaciones con directivos del balompié nacional y de la Confederación de Norte y Centroamericana y del Caribe del Futbol (Concacaf). Es más, cuando Codesal tenía la intención de sustituir a Jack Warner -presidente de la Confederación-, le prometió a Felipe que lo prepararía para quedarse en la Comisión.
Un día de fuego cruzado...