GÓMEZ PALACIO, DGO.- El director de Seguridad Pública, Arturo López Aguilera, declaró que en todos los casos de supuestos abusos de autoridad, la ciudadanía debe denunciar ante el Ministerio Público. En el asunto de las dos mujeres policías que tuvieron un altercado con una joven madre, el jefe policíaco dijo que Asuntos Internos inició una investigación.
Sobre el tema, el titular de la Policía Preventiva detalló que es importante el operativo de vigilancia implementado en la zona comercial, indicando que si bien existe malestar entre algunas personas, es labor del uniformado convencerlo en casos de requerir una revisión.
La clave para una inspección corporal sin incidentes esta en el buen trato del elemento a las personas”, dijo López Aguilera, aclarando que también existen situaciones donde los civiles se ponen agresivos desde el primer momento en que son abordados.
Además, el jefe policíaco recalcó que no se practica la discriminación al momento de evaluar los criterios que orillan a un agente a revisar a un ciudadano. Los parámetros son variados: la forma de vestir, el corte de cabello, la apariencia de “cholo”, tatuajes visibles, entre otros.
Versión
Verónica Flores Rodríguez y Patricia Puente López, agentes del Escuadrón Femenil de Seguridad Pública y comisionadas a la zona comercial de la ciudad, externaron su versión sobre la captura de Guadalupe Pascual de Ávila, de 28 años, registrada la tarde del sábado 13 de diciembre.
Con un hematoma visible en el ojo derecho, y algunos rasguños en el pecho, Verónica dijo que la mochila muy abultada de una de las mujeres llamó su atención, cuando salían del negocio de ropa “El Triunfo”, frente al mercado.
La mujer policía asegura que se dirigió correctamente a la civil, pero que ésta contestó airadamente, negándose a la revisión y sin atender la explicación de las uniformadas. Respecto a la intervención de Guadalupe, señaló que efectivamente levantó la mochila del suelo, pero que la abrió y se las aventó, cayendo todos los objetos.
Como se informó en su oportunidad, el altercado ocurrió a las 18:30 horas del sábado, y la inculpada fue consignada al Ministerio Público, asegurando que fue objeto de un abuso de autoridad.
Cuestionadas sobre la legalidad de las inspecciones de rutina, las dos agentes se reservaron la respuesta directa, pero explicaron que el objeto de las revisiones son la prevención del delito, argumentando que todo es por la seguridad del “sospechoso” y de la sociedad.