EFE
MADRID, ESPAÑA.- La cantante española Isabel Pantoja aseguró ayer ante el juez que la interrogó en el marco de una comisión rogatoria cursada por Perú que no hizo pago alguno para acelerar el trámite de adopción de una niña de ese país en 1996, según fuentes jurídicas.
Las fuentes dijeron que, aunque Pantoja había sido citada en calidad de testigo, el magistrado Guillermo Ruiz Polanco permitió que declarara acompañada por sus abogados Graciela Otondo y José Ángel Galán, ya que el tono de la mayoría de las preguntas que debía hacerle a petición de la Justicia peruana era incriminatorio.
A finales de enero pasado, la Fiscalía de Perú anunció el inicio de una investigación preliminar en relación con Isabel Pantoja por un presunto pago a Vladimiro Montesinos -ex asesor del antiguo presidente peruano Alberto Fujimori- para acelerar el proceso de adopción de una niña, cantidad que un diario peruano cifró en 80,000 dólares.
La cantante llegó a la sede de la Audiencia Nacional española, junto con su compañero sentimental, el ex alcalde de Marbella (sureste de España) Julián Muñoz, poco antes de las 13 horas de ayer tiempo local (12.00 GMT).
Aunque pretendió acceder al interior del tribunal por la puerta reservada a funcionarios y magistrados, se le impidió el paso y tuvo que entrar por la habilitada para el público en general.
Al término de la declaración, que se prolongó durante cerca de una hora, ni la tonadillera ni su pareja quisieron hacer declaraciones y permanecieron en el interior del tribunal mientras sus abogados atendían a la prensa.
Los letrados explicaron que "la adopción ha cumplido todos los requisitos formales que exigía la legislación peruana".
Se han vuelto a presentar los documentos que ya tiene la Justicia peruana para acompañar a la comisión rogatoria, que demuestran que la adopción está hecha de forma correcta y "absolutamente legal", subrayaron.
Galán insistió en que contra su cliente "no hay absolutamente nada, la causa está abierta por la Fiscalía (de Perú) contra Fujimori y Montesinos".
Indicó que Isabel Pantoja se encuentra "indignada" por la situación, aunque matizó que, al tratarse de un acto de colaboración con la Justicia, ha acudido en cuanto se la ha citado.
El letrado declaró que la cantante no ha pagado ninguna cantidad, salvo "las tasas legales de lo que vale un expediente de adopción, aquí, en China y en Perú" y que cumplió con todos los requisitos necesarios, incluidos los informes psicológicos y psicotécnicos.
Lo que más preocupa a Pantoja son los posibles efectos que el revuelo mediático pueda tener sobre su hija María Isabel, señalaron los abogados, quienes solicitaron el mayor respeto para ambas.
Cuando Galán y Otando terminaron sus declaraciones, Isabel Pantoja y Julián Muñoz abandonaron la Audiencia Nacional custodiados por media decena de policías, que los condujeron hasta el coche que les esperaba en la calle.