ROMA, (Reuters) - Italia está combatiendo el "spam", esos correos electrónicos no solicitados que inundan la Internet y enloquecen a los usuarios, llenándolos de frustración.
Bajo las nuevas regulaciones publicadas esta semana, las personas que envían "spam" enfrentan multas de hasta 90.000 euros (97.000 dólares) y un máximo de tres años de prisión, por bombardear a extraños con e-mail no solicitado.
El enviar un correo electrónico sin permiso del receptor es contra la ley en Italia. Después de recoger más de un millón de quejas de empresarios e individuos el año pasado, la policía de protección de datos ha decidido aplicar medidas más duras.
"El spam no sólo es una intrusión molestosa sino que consume tiempo el ir y borrar los mensajes. A nadie le gusta", dijo a Reuters Giovanni Buttarelli, un funcionario de alto rango de la agencia de protección de datos de Italia, en una entrevista telefónica.
Los e-mail no solicitados que se envían sólo una vez podrían acarrear a quienes lo envían una multa, pero para las compañías comprometidas en una campaña de envío masivo de spam, sufrirán consecuencias más serias.
La Unión Europea estima que 48 por ciento del tráfico mundial de correo electrónico es spam. El tiempo que se gasta limpiando los buzones de entrada cuesta a las firmas unos 2.500 millones de euros (2.800 millones de dólares) en productividad.
La mayoría de los países no tienen leyes que penalicen el envío de spam, siendo Estados Unidos el país donde se registra más esta actividad.