Reuters
MOSCÚ, RUSIA.- Dos mujeres suicidas causaron ayer la muerte de por lo menos 20 asistentes a un concierto de rock al aire libre en un aeropuerto de Moscú, además de las suyas, al hacer estallar los explosivos que llevaban, dijo el ministro del Interior.
Boris Gryzlov echó la culpa a los chechenos opuestos al plan del presidente ruso Vladimir Putin de celebrar elecciones en octubre en esa provincia y que fue anunciado 24 horas antes.
El portavoz de la policía moscovita Valery Gribankin declaró a los periodistas que los muertos habían sido 20 y que por lo menos 60 personas habían resultados heridas. Gryzlov había señalado antes que los muertos habían sido 16, sin contar a las suicidas.
Nadie ha reclamado ser autor del atentado, pero el primer viceministro del Interior Rashid Nurgaliyev dijo que la investigación había establecido una conexión con los separatistas chechenos.
“Una operación especial ha establecido que los terroristas suicidas estaban directamente relacionados con grupos armados fuera de la ley”, dijo. Los explosivos, dijo, eran similares a los usados por los comandos chechenos que ocuparon un teatro de Moscú el pasado octubre. Nurgaliyev dijo que entre los muertos había un niño. Las mujeres suicidas han sido usadas recientemente como operación táctica de los chechenos separatistas más extremistas que luchan contra el control ruso.
El Ministerio del Interior dijo que una de las mujeres había sido identificada como una residente de Chechenia nacida en 1983.
No se había aparentemente permitido el paso a las mujeres suicidas en el lugar del concierto y se hicieron volar con los explosivos ante las cabinas de control de la entrada en el aeropuerto Tushino, donde se habían concentrado miles de asistentes al concierto de bandas de rock que iba a durar todo el día.
“Doy por sentado que esta situación inhumana, este acto de terrorismo, está vinculado con la convocatoria de este acontecimiento”, dijo Gryzlov. Un cadáver aparecía cerca de una de las cabinas de admisión en el aeropuerto situado en los suburbios al norte de la capital rusa. Un segundo cuerpo yacía en una carretera de al lado.
Un representante de dirigentes chechenos que fueron expulsados cuando Rusia lanzó su segunda campaña en 1999 dijo que los líderes exiliados no tienen nada que ver con el atentado.
“Incluso si un llamado enlace checheno es encontrado, déjenme decir que la dirección de la República Chechena Ichkeria (separatista) no tiene nada que ver con tales actos que ve como algo inaceptable”, dijo Salambek Maigov a la cadena radial Ecos de Moscú.
Gryzlov dijo que el concierto se iría interrumpiendo gradualmente y que los espectadores serían evacuados.
Los medios informativos rusos dijeron que los hospitales de la capital rusa estaban preparando camas para recibir a los heridos en el atentado.
El decreto de Putin del viernes fue parte clave del Kremlin para encontrar una solución política a la crisis. Se aseguró apoyo para una nueva constitución regional en un referendo que se celebró en marzo pasado.