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WASHINGTON EU.- La coalición encabezada por Estados Unidos ha detenido a más de la mitad de los dirigentes iraquíes más buscados, pero el paradero del depuesto presidente Saddam Hussein y sus hijos sigue siendo un misterio.
Entre los detenidos hay jefes militares, dirigentes del partido Baath y científicos acusados de trabajar en los presuntos programas de armamentos químicos, biológicos, nucleares y de misiles.
L. Paul Bremer, el administrador norteamericano en Iraq, dijo a la prensa en el Pentágono la semana pasada que está complacido con los progresos en la búsqueda de los 55 iraquíes.
“Estamos progresando firmemente”, dijo. “Los estamos deteniendo semana tras semana y seguiremos haciéndolo”.
Se cree que muchos en la lista se han ocultado; otros podrían haber huido del país.
Los funcionarios estadounidenses dijeron no sabían de que hubiera otros iraquíes que hubieran huido a Siria, que bajo presiones estadounidenses expulsó a algunos de ellos que se habían refugiado en esa nación vecina durante la guerra.
El blanco prioritario es el mismo Saddam, señaló Bremer, quien según oficiales de inteligencia sobrevivió a la guerra y se oculta en Iraq.
“Evidentemente, preferiría tener pruebas contundentes de que Saddam ha muerto o bien tenerlo vivo y bajo nuestra custodia”, dijo Bremer.
“Creo que es importante porque permite a los baathistas andar por los bazares y las aldeas diciendo, como lo están haciendo, que Saddam está vivo y va a volver”, dijo Bremer.
“La consecuencia de eso es que se vuelve más difícil para la gente que teme a los baathistas _o sea, casi todo el mundo_ colaborar con nosotros porque temen su regreso”.
No se sabe su algunos de los prófugos han dirigido los atentados recientes contra las tropas de ocupación, dijeron las fuentes.
Buena parte de la información sobre Saddam y sus hijos Qusai y Odai es contradictoria, dijeron las fuentes, que hablaron del tema bajo condición de permanecer anónimas.
Los detenidos son interrogados acerca de otros altos funcionarios del gobierno de Saddam, los programas de desarrollo de armamentos y los vínculos del régimen con el terrorismo internacional.
Hasta ahora, las declaraciones de los prisioneros coinciden en negar que Iraq desarrollara armamentos, dijeron funcionarios estadounidenses.
Los iraquíes arrestados son interrogados para tratar de encontrar algún tipo e información sobre otros líderes del gobierno de Saddam, así como de sus programas para desarrollar armamento prohibido de destrucción masiva y las relaciones del gobierno derrocado con organizaciones del terrorismo internacional.
Entre los líderes capturados se encuentra el comandante de la Fuerza Aérea Hamid Raja Shalah al-Tikriti, cuyo arresto fue anunciado el sábado. Oriundo de Tikrit, el pueblo de Saddam Hussein, fue uno de los comandantes militares iraquíes que se reunían regularmente con Saddam antes de que la guerra comenzara.