La tristeza y la desesperanza, las ganas constantes de llorar, pueden ser uno de los síntomas que caracterizan a la depresión.
México, (Notimex).- Las posadas, los brindis decembrinos, la Navidad y el año nuevo, son parte de una gran fiesta para la mayor parte de la población; sin embargo, para algunos, por el contrario, esta época es de nostalgia, melancolía, que incluso puede llevar a la depresión y, posteriormente al suicidio.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, de los aproximadamente 30 millones de mexicanos que han presentado alguna depresión durante su vida, un gran porcentaje han experimentado este episodio en la época decembrina.
Lo anterior, conlleva a que en la temporada pasada, el número de suicidios se incrementen hasta en más de un 30 por ciento en algunas entidades del país, como el Distrito Federal, de allí que para muchos, en lugar de ser una feliz Navidad, ésta se convierte en amarga.
Cifras del Servicio Médico Forense (Semefo) del Distrito Federal, en noviembre, el promedio de suicidios es de alrededor de 23, mientras que para diciembre, la incidencia se incrementa hasta llegar a una media de 37, lo que representa alrededor del 30 por ciento más.
Para Jesús Padilla, siquiatra del Centro Médico Nacional Siglo XXI, el frío, las fiestas decembrinas que suelen remover muchas historias, a veces de nostalgia y tristeza, son las responsables de esa mayor depresión en la población, principalmente en mujeres, quienes tienen más intentos de suicidio, aunque son los o l quonmamás.
Padilla sostiene que ello ocurre porque al final del año se suele hacer un balance de la vida, y cuando éste arroja pérdidas, ya sean reales, es decir, muertes de familiares o seres queridos, o simbólicas, como puede ser la ruptura de una relación amorosa, conlleva a una depresión, que se puede tornar severa.
Si bien los aspectos afectivos tienen incidencia en la generación de una depresión, el clima y ambiente también, pues recientes estudios han comprobado que la menor cantidad de luz de día, provoca que el cuerpo genere menos serotonina, neurotransmisor responsable, entre otras funciones del estado de ánimo, por lo que quienes menos tienen pueden llegar a una depresión o tristeza.
Roberto Mendoza Zepeda, presidente de la Asociación Mexicana para la Divulgación y Actualización Médica, señaló que en algún momento de la vida hemos sentido tristeza y, por lo general, la dominamos; sin embargo, millones de personas en el mundo no pueden vencer ese sentimiento.
Tales individuos, dice, sufren de una enfermedad mental conocida como depresión, la cual se caracteriza por daño en el estado de ánimo, falta de interés por desarrollar cualquier tipo de actividades, trastornos del sueño, pérdida de la autoestima y del deseo sexual, pesimismo y desesperanza.
Mendoza indicó que la depresión afecta en promedio a tres de cada 10 individuos en alguna época de su vida, siendo la pobreza, el desempleo, la violencia, el estrés profesional, el divorcio, el alcoholismo y la drogadicción, los principales factores que contribuyen a su aparición.