“A nuestro país le urge un sistema racional de resolución en sus problemas”. J. Campos V.
Lo que en tecnología se ha avanzado, en la desvalorización e inmoralidad en nuestra sociedad y sistema político su retroceso deja mucho qué desear. Desde aquella señora de tristes recuerdos Julia Carabias encargada de Ecología en el sexenio de Zedillo, hasta el actual secretario de la misma dependencia Víctor Lichtinger, nuestro país vive un eterno y oscuro panorama, no han sido capaces las actuales autoridades de parar el desmonte a destajo que nuestros bosques y selvas sufren día a día. El agua se agota y junto a la Comisión Nacional del Agua (CNA), parecen estar atadas de manos o llenas de lana para servir al patrón.
No existe en México un solo programa vigente que garantice un ambiente limpio y transparente sobre los ya contados recursos naturales, sólo planes, los más abortados, los otros inconclusos y en su mayoría obsoletos proyectos lanzados desde plataformas políticas que jamás aterrizan, puras voluntades testamentarias, con una situación permanente de desequilibrio e incertidumbre para la país. En un paraíso terrenal se ha convertido México para inversionistas extranjeros, sobre todo aquellas maquilas e industrias que nadie las regula en lo que a contaminación concierne y si acaso existe una comisión reguladora sobre estos asuntos, ésta se hace de la vista gorda ¿$? y los esquilmos y exudados tóxicos que generan las plantas van a parar al lecho de un río seco o con agua y en el peor de los casos a la periferia de alguna ciudad.
La bahía de Acapulco, lugar paradisíaco entre las pocas playas con que aún cuenta México es el ejemplo más tangible, el drenaje de muchos hoteles y otros tubos con desechos del sistema de agua y alcantarillado son arrojados al mar con todo el descaro del mundo, su contaminación es tal que en la tarde o por la noche al pasar por la carretera Costera Miguel Alemán, rumbo a la costa grande, se percibe un tufo podrido en algunas áreas. Esto lo sabe el presidente de Acapulco, el actual gobernador de Guerrero René Juárez y el secretario de Ecología a nivel nacional, Víctor Lichtinger, también conocen el problema, se dice que hasta corrió a un funcionario de Profepa del Estado de nombre Inocente de León Pineda sólo porque se atrevió a denunciar este crimen contra un gran recurso no renovable en el Estado de Guerrero ¿cómo la ven?
La sinrazón e insana manera de destruir el ambiente que hace Pemex no tiene calificativo, ni madre, en pos de beneficiar a una empresa y so pretexo de alcanzar cifras estratosféricas en producción de crudo o gas natural y servir a intereses extranjeros. Pemex al igual que la CFE no se detienen ante nada, talan montes, arrojan elementos contaminantes al suelo que se lleva entre sus residuos flora y fauna, tanto en el mar con sus plataformas, como en tierra, sólo basta una miradita al Estado de Campeche, Tabasco, Veracruz, para ver el “moderno” desastre ecológico.
Los basureros que nacen como hongos en la Republica mexicana, simples tiraderos de basura con disfraz de Relleno Sanitario, vulnerando toda regla sanitaria y llenando el bolsillo de dinero a nuestras incorruptas autoridades, presidentes municipales y jueces, para otorgar permisos a sus camiones de vomitar toda la basura que quieran sin estudio previo o regulación del tipo de suelo, toda una catástrofe irónica e irrespetuosa para el pueblo y esto no se hace a escondidas, no, al contrario se lleva a cabo bajo la mirada pusilánime y de Torquemada inquisición, que tienen nuestras autoridades y recuas de membrete en Ecología.
En la mayoría de los casos a cualquier nivel desde el nacional hasta municipal estas comisiones se dan por compadrazgos, nepotismo o por compromisos de campaña, de ahí el resultado de los ¡cómos y porqués del Prigenético! y cómo la ineptitud y los pretextos suplen la eficiencia. En La Laguna, el tiradero de residuos del mármol en donde se les pega la gana a los magnates de estas industrias, los ladrilleros sin solución y hasta los cheyennes, cherokees y apaches les envidiarían las señales de humo y la distancia a que éstas se divisan. Los desechos tóxicos recogidos en los consultorios médicos y hospitales van a parar al basurero de Matamoros, Coahuila, llamado mala y pomposamente Relleno Sanitario. La elaboración de carbón del mezquite y el saqueo permanente de nuestra flora. La termoeléctrica de Ciudad Juárez. ¿No que con unos cuantos litritos de agua funcionaría? Y aquí sin ser profeta me atrevo a decir que dentro de muy poco tiempo, el agua de la presa Lázaro Cárdenas no será motivo de pleito entre los ejidatarios y comuneros para siembra, sino ante la escasez en el subsuelo, el agua de las presas será reñida para ser utilizada en uso doméstico y consumo humano de parte de los laguneros, porque el manto freático se agota a pasos acelerados y el cultivo de alfalfa no ha sido capaz de llenar los bolsillos de los voraces lecheros. Cómo estará la cosa que ni Cuatrociénegas y su desierto se salva de estos invasores.
En fin, mientras nuestras eximias y probas autoridades ecológicas velan el sueño de los justos y sus cuentas bancarias están a buen resguardo, los camiones de ruta echan humo como chacuacos, los encargados de la Profepa siguen con sus cifras alegres y gráficas de ensueño....Correo-e-linga___1031@hotmail.com