WASHINGTON (AP).- Un pequeño electrodo conectado a una aguja que toca el nervio que causa intensas jaquecas crónicas es implantado bajo el cuero cabelludo junto al ojo izquierdo y ha revelado ser un remedio eficaz contras las migrañas.
El artefacto, conectado a una batería instalada debajo de la clavícula, envía impulsos eléctricos constantes al nervio causante del dolor.
Millones de personas sufren dolores intratables de la cabeza o el rostro. Algunos son verdaderas migrañas, originadas en el cerebro, pero otros, llamados erróneamente migrañas, son provocados por nervios de la cara o el cuero cabelludo.
Algunos médicos están estudiando cómo los estimuladores nerviosos implantados en distintos lugares de la cabeza pueden aliviar esos dolores que provocan la discapacidad del paciente.
La gente experimenta dolor cuando las células nerviosas se transmiten señales de unas a otras hasta que el mensaje de "me duele"' llega al cerebro.
Desde hace mucho tiempo se implantan electrodos a lo largo de la médula espinal para bloquear ciertos dolores que afectan desde el cuello hacia abajo mediante la interrupción de esas señales.
Para interrumpir la señal, el estimulador debe ser colocado en un lugar más alto que el del origen del dolor; para así bloquear la molestia antes de que la señal llegue al cerebro.
Entonces se descubrió que el estímulo de los nervios cefálicos y faciales por debajo de la piel, no directamente contra la médula, podía resultar eficaz. Al principio los médicos atacaron el nervio occipital para aliviar el dolor que se produce en la región posterior de la cabeza.
Ahora empiezan a atacar los dolores frontales y faciales en el nervio supraorbital, apenas por encima del ojo.
Parece lo más lógico, pero "realmente sorprendió" a los especialistas en jaquecas que estos implantes aparentemente funcionen bien, dijo el doctor Robert Levy, neurocirujano del Northwestern Memorial Hospital que ha implantado estimuladores en la frente a cuatro personas. Las dos primeras ya llevan dos años jaquecas.
La estimulación nerviosa "ha resultado maravillosa para esta clase de jaquecas", dijo el doctor Sandeep Amin, que ha tratado a dos pacientes de esta manera.
El implante es una operación sencilla. Se coloca una batería bajo la piel junto a la clavícula. Un cable va desde la batería, por el cuello, hasta el cuero cabelludo. Se necesitan dos implantes si el dolor es bilateral.
Una bobina enciende o apaga la corriente. Al apagarla vuelve el dolor, pero el artefacto puede ser dañado por los dispositivos de seguridad en los aeropuertos y debe ser apagado hasta que el paciente los pasa.
A pesar de que la estimulación nerviosa aún se encuentra en fases experimentales, las cirugías están disponibles por entre 5.000 y 10.000 dólares