Algunos de los detonantes de la migraña en los niños susceptibles son: el consumo de chocolate, los conservadores de enlatados y embutidos, el cacahuate, la nuez y el piñón.
SUN-AEE
Son muchas las ocasiones en que se cree que hay enfermedades que atacan sólo a adultos, como es el caso de la migraña. Y lo peor es que cuando la padecen los niños, los mayores piensan que mienten sobre la intensidad del dolor e, incluso, desconocen que debe ser tratada por un especialista.
La doctora Justina Sosa Maldonado, jefa del Servicio de Neurología Pediátrica del Centro Médico Nacional "La Raza" del IMSS, explica que 90% de los niños que padecen migraña tienen antecedentes familiares, es decir, que el mal lo padecen su papá o mamá. La especialista indica, empero, que se desconoce con precisión la causa, pero se ha encontrado una falla en los neurotransmisores, principalmente, por el incremento en los niveles de serotonina y dopamina de quienes padecen la migraña.
MALIGNA PRESENCIA
La doctora Sosa Maldonado cuenta que la enfermedad se caracteriza por un intenso dolor de cabeza, náuseas, vómito y molestias ante la luz y el ruido, "al grado tal que incapacitan al niño para jugar y realizar sus actividades diarias. Estas son las principales manifestaciones de la migraña infantil, misma que se presenta de forma súbita y repetida. En ocasiones, hay vértigo y se perciben manchas de colores".
Dice que el dolor de cabeza tiene una duración que va desde media hora hasta dos horas. Algunos de los detonantes de la migraña en los niños susceptibles son: el consumo de chocolate, los conservadores de enlatados y embutidos, el cacahuate, la nuez y el piñón. También puede producirse por ayunos prolongados, desveladas y fuertes cuadros de estrés y ansiedad, muchas veces, generados por problemas escolares.
La migraña, insiste la doctora Sosa Maldonado, se controla con la administración de analgésicos y evitando los detonantes. Es más frecuente en el varón, en 70% de los casos antes de los 10 años; después, a los 11 años, son las niñas las que más la padecen, hasta en 60%. La mayor incidencia se da en la adolescencia, a partir de los 11 años, por factores hormonales propios de la edad, y por tensiones escolares, desvelos y ayunos prolongados.
SABER PARA ENTENDER
La especialista apunta que existen dos tipos de migraña: con aura y sin ella. La primera se caracteriza porque minutos antes de que empiece se perciben manchas o lucecitas de colores, por lo que hay tiempo de tomar analgésico y, por lo tanto, evitar el dolor; en la segunda, que representa 90% de todos los casos, el dolor de cabeza se presenta súbitamente, sin ninguna manifestación previa.
En la mayoría de los casos el mal se diagnóstica y atiende en los hospitales generales de zona y el tratamiento es de dos tipos: uno es basándose en analgésicos y evitando ciertos alimentos, así como durmiendo; el otro, es el profiláctico, que consiste en medicamentos especiales para reducir su frecuencia a menos de tres crisis al mes.