Reuters
LONDRES, INGLATERRA.- El cantante Ozzy Osbourne, que se recupera tras sufrir un accidente de motocicleta, llegó a lo más alto en las listas británicas de ventas de música pop esta semana, con un dueto con su hija Kelly.
Osbourne, de 55 años, quien se hizo famoso en la década de 1970 como líder del grupo Black Sabbath, se fracturó ocho costillas y una vértebra del cuello. También debió ser sometido a una intervención quirúrgica que restableció el flujo de sangre a una arteria dañada.
El tabloide The Daily Mirror dijo la semana pasada que según Sharon Osbourne, su marido cesó de respirar y su corazón se detuvo durante un minuto luego del accidente. Un guardia de seguridad lo logró resucitar, añadió la esposa del cantante.
No obstante, el cantante no renunció a la salida del nuevo disco Changes (Cambios) -una nueva versión de una canción histórica de Black Sabbath- que ha llegado al primer lugar de las listas británicas de ventas de sencillos.
Tras el accidente, las previsiones de la industria apuntaban a que el último trabajo del roquero iba a alcanzar la cima de la lista en Navidad, previendo que la gente hubiera comprado el sencillo por la simpatía que provoca Ozzy, quien ha pasado de ser un duro protagonista del rock pesado a una estrella querida por la serie de TV de la realidad The Osbournes.
El sencillo que cantan padre e hija ha superado al ídolo pop Will Young, dejándolo en segunda posición con Leave Right Now, mientras que la banda estadounidense de hip-hop Black Eyed Peas quedó en el tercer puesto con Shut Up.
Sale del pulmotor, tras accidente
El músico registra buenos progresos luego de sufrir un accidente a bordo de su motocicleta todo terreno, y ha sido sacado del pulmotor, dijeron ayer funcionarios de un hospital.
El ex presentador del grupo musical Black Sabbath pudo hablar con su esposa Sharon en el hospital Wexham Park situado en Slough, al oeste de Londres, donde fue llevado tras su accidente, ocurrido el lunes de la semana pasada, dijo la administración del hospital en un comunicado.
Osbourne, de 55 años, ha estado en una unidad de terapia intensiva, y respiraba con ayuda de un pulmotor desde el accidente ocurrido en su mansión de Buckinghamshire, en el sur de Inglaterra.