Agencias
Los pies nos sostienen, nos llevan y nos traen, pero no siempre reciben los cuidados adecuados, de hecho a menudo se antepone la moda o la vanidad a la hora de escoger un par de zapatos, principales causantes de los molestos juanetes.
?Cuando el calzado genera presión sobre el dedo gordo, éste se encima sobre los otros, lo cual ocasiona una deformación del hueso, conocida como juanete, una joroba, acompañada de inflamación y dolor?, explica la podóloga Sonia Mancilla.
Las primeras manifestaciones de que un juanete está por aparecer son: irritación, por la fricción generada entre la piel y el zapato. Después aparece una especie de ardor con dolor, justo en la coyuntura del hueso.
Cuando esto pasa es necesario cambiar de zapatos y acudir con un especialista para que haga un chequeo, ya que si esto se deja puede volver a ocurrir lo mismo con otros zapatos, y entonces el problema irá agravándose. En caso de ya existir una deformación en el dedo, la primera alternativa es utilizar un separador, que se coloca en medio de los dedos para evitar que el gordo se encime sobre los otros. Así se corrige la postura del dedo y se detiene la deformación del hueso.
?La malformación ya no se corrige, pero al colocar el separador se evita que el dedo continúe atrofiándose?, afirma la especialista.
Existen dos tipos de separador: uno que se utiliza con el zapato y otro que es para uso nocturno, éste viene con una especie de tira que pasa por el empeine y ejerce presión para separar el dedo gordo de los demás.
Cuando el problema apenas inicia, basta con utilizar el separador por unos cinco o seis meses, pero si la deformación del hueso no se detiene y el paciente continúa presentando molestias, entonces se pasa a la otra opción, la cirugía, que también se recomienda cuando la alteración ya es severa.
Más vale prevenir
Los zapatos que ocasionan este tipo de deformaciones son los que están demasiado estrechos o puntiagudos, porque la zona en donde se colocan los dedos no es lo suficientemente amplia.
También las zapatillas demasiado altas, ya que todo el peso del cuerpo se carga en los dedos del pie.
Con el calzado infantil se debe tener mucho cuidado, puesto que los niños suelen elegir los zapatos basados sólo en el diseño o la moda, sin importar si les lastiman o no. ?Tanto para niños como para adultos es recomendable comprar los zapatos un número más grande del que se calza para evitar molestias y deformaciones en los dedos del pie?, recomienda la podóloga.