SAO PAULO, Brasil, (Reuters).- El político brasileño José Genoino puede agradecer a su vanidad el haber escapado a un secuestro.
Genoino, presidente del gobernante Partido de los Trabajadores de Brasil y uno de los asesores principales del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, estaba a punto de salir de su apartamento en la ciudad de Sao Paulo para participar en un programa de la televisión brasileña cuando se percató de que había olvidado su peine.
El político, un ex guerrillero izquierdista con una canosa y abundante cabellera, dejó a su chofer y a su asistente de prensa esperando en el automóvil y regresó a su apartamento para buscar el peine.
"Todos los periodistas saben cómo es él: siempre se peina antes de participar en una conferencia de prensa", dijo su asistente de prensa, Daniela Farah Antunes. Mientras esperaban a Genoino, Antunes y el chofer fueron secuestrados y robados.
Cuando finalmente el político regresó con su peine tuvo que esperar un rato a sus amigos, creyendo que habían ido a comprar cigarrillos. Los dos secuestrados fueron liberados, ilesos, poco después.