Gómez Palacio, DGO.- La tentación de ganar dinero sin esfuerzo lleva a Ernesto a visitar la tortillería varias veces al día. Deposita unas monedas en la ?maquinita? que está afuera, de colorida pantalla y apariencia inofensiva, que en casi todas las ocasiones se queda con ellas y en otras devuelve más pesos de los que se ?traga?.
Lo que se muestra como uno más de toda la serie de videojuegos a que tiene acceso la población infantil en misceláneas, tiendas de abarrotes y hasta en las banquetas de domicilios particulares, sobre todo en las colonias de la periferia, constituye una práctica que pese a estar penalizada, es muy socorrida por los que están ávidos de dinero fácil: la apuesta.
Es lo que la Asociación Nacional de Padres de Familia ha denominado ?mini casinos?; el funcionamiento de máquinas electrónicas cuyo atractivo es dar más dinero a cambio del que se deposita, con sólo oprimir algunos botones y con mucha suerte de por medio.
?Mario Slot? se llama el juego, caracterizado por la imagen un poco alterada del típico personaje del juego de video ?Mario Bross?, al centro de la pantalla y a su alrededor, una serie de pequeños dibujos (sandías, tomates, números) cada uno con un valor asignado, que después de depositar una o varias monedas, el jugador debe seleccionar con otros botones ubicados en la parte inferior.
La máquina selecciona en qué momento detenerse y es cuando el jugador puede no recibir nada o por el contrario, ver multiplicado el valor del número seleccionado de acuerdo con la cantidad que ingresó.
Para la agrupación civil es un problema partiendo de que las apuestas no están permitidas en nuestro país.
Existe desconocimiento
Según miembros de la Asociación de Padres de Familia, quienes pidieron omitir sus nombres, a través de estos juegos se está marcando una fuerte inducción de la población infantil hacia las apuestas, incluso con el desconocimiento de los alcances que esto puede tener por parte de los encargados de los establecimientos que las exhiben.
Según se menciona, muchos tenderos y dueños de pequeños negocios no saben que están contribuyendo a promover una actividad ilícita, de modo que sólo se concretan a conectar la ?maquinita? y recibir una comisión de quienes las distribuyen, a los que tampoco tienen identificados.
Tal es el caso de Sanjuana Pérez , ella desconoce que las ?maquinitas? de apuestas operan en condiciones irregulares.
Desde hace seis meses, según dice, una persona que no conoce le ofreció colocarla afuera de su casa, sobre la calzada La Joya sin número en el ejido del mismo nombre, junto a otra máquina de videojuego que tiene ahí desde años y de lo que se ayuda para solventar el gasto diario.
?Estoy enferma de mi pierna y no puedo trabajar ni hacer otra cosa?, dice en tono de queja mientras muestra la cicatriz de la perforación que le quedó en el muslo izquierdo a causa de una bala, desde hace un año cuando uno de sus hijos fue baleado por unos sujetos en la banqueta de la vivienda.
La ama de casa dice que el distribuidor de la máquina apenas le deja 70 u 80 pesos a la semana como comisión, por permitirle que ésta opere, pero según comenta, nadie se ha presentado a inspeccionar las condiciones en que están trabajando los aparatos electrónicos.
Sin embargo, los encargados de los videojuegos aseguran que la comisión es mucho más atractiva, sobre todo porque se trata de un aparato irregular que al poco tiempo debe ser reubicado.
Empresarios del ramo de videojuegos aseguran que se trata de una red organizada, que a sabiendas de la actividad que está desarrollando, no instala sus aparatos en los locales de videojuegos que están en el interior de centros comerciales, a la vista de muchos, sino que procura distribuirlos en las tiendas de abarrotes y domicilios particulares de las colonias de la periferia y cambiarlos de sitio cada determinado tiempo para evitar ser detectados.
En la actualidad, la Asociación busca por todos los medios evitar que los legisladores aprueben el funcionamiento de casinos en todo el país.
Videojuegos, afectados
Un representante de una de las empresas distribuidoras de videojuegos de Torreón, refiere que el uso de las máquinas ?mini casinos? está afectando directamente a esta rama de la industria del entretenimiento.
Quienes las distribuyen, dice, se escudan en el funcionamiento de otros aparatos electrónicos que no representan ningún perjuicio para los niños que los utilizan, mostrándolo como un juego más pero que en la realidad está generando entre los usuarios una adicción a ganar dinero.
Expone que la Comarca Lagunera comienza a ser punto de extensión de este problema, que en otras entidades como Puebla, San Luis Potosí o el Estado de México tiene mayores alcances.
Incluso, menciona, en estas regiones se les ha manifestado que una de las principales empresas distribuidoras de ?mini casinos? está localizada en Gómez Palacio, pero la compañía que él representa no la ha podido identificar.
Según los diagnósticos del personal que supervisa la distribución de los aparatos en su empresa, se estima que en Torreón estén operando alrededor de 300 máquinas ?mini casinos?, aunque la cantidad puede ser mucho mayor en la vecina ciudad.
Las ganancias, asegura, son millonarias para los dueños de esas máquinas, aunque los encargados de los establecimientos que las operan también tienen una ganancia que les resulta atractiva para seguirlas manteniendo en sus locales.
El empresario considera que el videojuego no es nocivo como tal, si los padres y madres tienen el ojo puesto sobre la forma en que sus hijos lo utilizan.
Reconoce, sin embargo, que existen contenidos cargados de escenas violentas y de sexo o erotismo, cuyo uso debe ser prohibido por las autoridades de cada localidad.
Percepción equivocada
Para el psicólogo clínico Humberto Guajardo Acuña, el uso de los denominados ?mini casinos? puede fomentar el principio de placer entre la población infantil, hasta generarle una percepción equivocada de la realidad respecto de la forma de conseguir dinero.
Según expone, siempre que un niño obtiene una respuesta fácil ante una necesidad, llega a la conclusión de que no es necesario ningún otro esfuerzo para lograrlo.
Cuando a un menor en casa se le da la oportunidad de conseguir permisos, prioridades y favores, sólo porque sí, sin ninguna obligación ni esfuerzo, va creándose una idea de que no necesita poner a salvo ninguna característica personal para conseguir lo que quiere.
Humberto Guajardo resalta que de alguna forma, al niño se le está enseñando que el periodo de las reglas y el orden, en el que se le comienzan a dar algunas responsabilidades y labores incluso dentro del hogar, no tiene que seguirlo.
?Desde el punto de vista más ligero, el niño está comprando su tranquilidad y obedeciendo únicamente a este principio de placer, que es el de buscar sin importar la forma de hacerlo?.
Tratándose del dinero, el niño no sabe que no es fácil ganarlo, pero si lo hace a través de este tipo de juegos aparentemente inofensivos, su idea a partir de entonces será que no es necesario realizar ningún esfuerzo para conseguirlo, pues tendrá que salir de algún lado.
En la actualidad, los jóvenes no están muy dispuestos a realizar esfuerzos, pero a la vez son más exigentes y piden muchas prerrogativas a más temprana edad, como el tener sus propias llaves de la casa, llegar tarde los fines de semana y traer un auto o una tarjeta de crédito.
?Debe tomarse en cuenta que el dinero es un generador de poder, manipuleo y otras cosas y si alguien que lo obtiene no lo sabe manejar adecuadamente, sobre todo si tiene problemas emocionales, puede verse involucrado en muchas situaciones negativas?.
Al decir del psicólogo clínico, el adolescente que está inmerso en una situación de ganar con poco o ningún esfuerzo, reflejará esta conducta en otros ámbitos como la escuela o el trabajo, en los que buscará obtener dinero o posición pero rehusándose a recibir órdenes.
Sin embargo, para el especialista sería favorable la legalización de los casinos destinados a la población adulta, tomando en cuenta que en todos los lugares se tiene conocimiento de que se organizan rifas clandestinas, peleas de gallos o de perros.
La gran diferencia es que tratándose de adultos, son ellos quienes ganan su dinero o su patrimonio y a los que le duele perderlo sin obtener nada a cambio; en el caso de los niños es distinto, porque ellos tienen todo qué ganar y nada qué perder, de manera que si se legaliza el uso de máquinas de apuestas para el público infantil, se les estaría induciendo a asumir conductas de cero esfuerzo que pueden incluso llegar a establecerse como formas de vida.
Humberto Guajardo Acuña considera entonces que, además de erradicar este tipo de juegos, los padres de familia deben estar vigilantes del tipo de entretenimiento a que recurren sus hijos, informándoles de modo preventivo e inculcándoles la realidad del esfuerzo.
El principio de la realidad, el que lleva al individuo a regular sus impulsos, debe anteponerse sobre el principio de placer.
Juegos errantes
Por su condición irregular, las máquinas de apuestas sólo permanecen
un corto tiempo en determinado lugar y luego se les reubica. Hasta la semana pasada se detectaron algunas en las siguientes direcciones:
* Tortillería de la calzada Urano número 305, Fracc. Satélite.
* Miscelánea ?San Judas?, en la calle Estrella del Norte, entre Observatorio y calzada Vía Láctea, del mismo sector.
* Calzada La Joya sin número, entre calles Zurita y Zafiro,
ejido La Joya (domicilio de Sanjuana Pérez).
* Avenida Cuitláhuac, entre Francisco Márquez y
Juan Escutia, colonia Aviación.
* Calle ?H?, entre Cuarta y Quinta, colonia Eduardo Guerra.
* Avenida Felipe Ángeles y calle Cero, colonia Polvorera.
* Segunda Rinconada, frente a la escuela de dicha colonia.
* Calle Tercera número 198, colonia Antigua Aceitera.
* Calzada 20 de Noviembre número 271,
colonia Aquiles Serdán.
* Calle Panteón, colonia Aquiles Serdán.
* Tortillería ?Santo Tomás?, del ejido del mismo nombre.
* Tortillería ?Alfredos?, avenida Cuauhtémoc entre
González y Ocampo, del municipio de Matamoros.
* Ejido El Águila.
* Calle Xochicalco, junto a la privada Segunda Moctezuma, colonia Carolinas.
* Calzada Xicoténcatl de la colonia Moctezuma.
* Avenida Chapultepec y calle Rodríguez, colonia Esparza.
FUENTE: Investigación El Siglo de Torreón
Ley concreta
La Ley Federal de Juegos y Sorteos, vigente desde 1947, establece
en su Artículo Primero la prohibición, en todo el territorio nacional,
de los juegos de azar y los juegos con apuestas.
* En el Artículo Segundo refiere que ?sólo podrán permitirse
el juego de ajedrez, el de damas y otros semejantes; el de
dominó, de dados, de boliche, de bolos y de billar; el de
pelota en todas sus formas y denominaciones; las carreras
de personas, de vehículos y de animales y en general toda clase de deportes; los sorteos.
* Los juegos no señalados se considerarán como prohibidos para los efectos de esta Ley?.
FUENTE: Investigación El Siglo de Torreón