Por dondequiera surge el comentario de los vocablos que se dice que la Academia de la Lengua ya aceptó y hay gente incluso que exclama indignada ¿Pero cómo se les ocurre autorizar todas esas groserías si ya de por sí somos deslenguados o mal hablados y luego con el permiso de los señores académicos, pues entonces la cosa va a estar “pior”. (1)
Lo que pasa es que hay qué entender claramente las funciones de la Academia Española y sus afiliadas en los países de habla hispana.
Recordemos que el lenguaje está vivo… Uy, es como un animalito que se mueve, que crece o más bien dicho, cambia constantemente. Es un ser vivo como yo o como usted que hoy no somos iguales que ayer ni vamos a ser así mañana.
Recordemos también que el uso y la costumbre son fuente del idioma. Entonces un barbarismo por más bárbaro que sea, la gente lo usa y lo usa tantas veces que en un momento determinado deja de ser barbarismo y se convierte en un neologismo que es una palabra nueva (2)
Todo esto hace que en cuestiones del lenguaje no puede haber reglas fijas perdurables porque ¿cómo? Fíjese, el Quijote decía “trujimos…” y ahora ya no se dice así, es un error. Y si el que bebe es bebedor y el sitio es el bebedero, hay qué llamar comedero a lo que hoy es comedor, comedor será quien coma como es bebedor quien bebe.
Lo que ha hecho la Academia con todas esas imprecaciones,(3) vulgaridades o maldiciones que publicó, no es precisamente aprobarlas sino testimoniar que son vocablos, palabras que nosotros los mexicanos a cada rato las decimos y pues ¿a poco no es cierto? ¿No ve usted que todos las usamos a cada momento, casi como si fueran los puntos y comas de nuestra conversación?
Entonces la Academia lo que hace es decir: Los mexicanos dicen esta palabra terminada en ón o esta expresión que termina en ejo y no es conejo… sino que la usa como adjetivo… En fin, ni la aprueba ni desaprueba ni la autoriza ni nada… ¿O a poco usted iba a pedir autorización, por ejemplo, cuando va usted en su auto y se le atraviesa un sujeto que va en la pura baba…¿Pide permiso a la autoridad para lanzarle dos o tres linduras? Fíjate como manejas… y luego por ahí algunas expresiones no muy edificantes de ésas que ha dicho la Real Academia de la Lengua que decimos y sí las decimos… ¿para qué negarlo?
Por si las dudas
1. Pior . Ahora dice la gente que “pior” es peor que peor.
2. Nueva. Nuevecita y de paquete, chico.
3. Imprecaciones. Son palabras o expresiones con las que se manifiesta el deseo de que a alguien le suceda algo malo.
Pregunta: Explíqueme por favor qué significa “crímenes contra lesa humanidad”, Tiburcio Turcios.
Respuesta: La expresión es “crímenes de lesa humanidad”. Lesa significa lesionada. Los crímenes de lesa humanidad son aquéllos que lesionan a todo el mundo, a toda la humanidad.
Frase loca… de remate
El libro de matemáticas se suicidó. Creo que tenía demasiados problemas.
¡Hasta mañana!
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