GÓMEZ PALACIO, DGO.- Lecheros de Gómez Palacio jugó bajo protesta su partido del domingo anterior contra Tantoyuca, Veracruz, en virtud de que la directiva del equipo veracruzano cambió con engaños la sede del encuentro, según informó Eugenio Morán Aguirre.
El director operativo de Lecheros indicó que el juego había sido programado en el Estadio Ada, pero al llegar su equipo a Tantoyuca el sábado por la tarde, pretendió hacer un reconocimiento de la cancha, pero les negaron el acceso a la misma.
Desde afuera pudieron observar que el terreno de juego se encontraba en pésimas condiciones y no tenía porterías.
El domingo se presentó el presidente del club veracruzano, licenciado Óscar Torres, con el técnico de Lecheros, Ricardo Gallardo Hermida, para informarle que el encuentro sería en el Estadio Sanver.
El directivo veracruzano se manejó con engaños, manifestó a Gallardo Hermida que contaba con el permiso de la Segunda División Profesional y de la propia directiva de Lecheros, lo cual no era cierto.
Morán Aguirre tuvo conocimiento de lo anterior ese mismo día, pero por respeto al público, ya que asistieron alrededor de seis mil personas al encuentro, decidieron que Lecheros jugara el partido bajo protesta, la cual fue enviada anteayer a la Federación Mexicana de Futbol (FMF), están en espera de una respuesta a la misma.
El marcador favoreció a los veracruzanos por tres goles a uno, con anotaciones de Vicente Álvarez, Carlos Lugo y Manuel Molleda, el gol de la honra para los gomezpalatinos fue de Iván Sánchez.
El equipo lagunero regresó el lunes por la mañana, sano y salvo, después de un largo viaje y una mala atención en el hotel donde se hospedaron.
A las 16:00 horas de ayer iniciaron su preparación para el juego del próximo sábado a las 15:00 horas contra la Universidad de Tamaulipas en el estadio de la Unidad Deportiva “Francisco Gómez Palacio”, partido correspondiente a la jornada número tres del Torneo Apertura 2003.
Lecheros saldrá en busca de su primera victoria de la temporada, actualmente tiene un juego empatado y uno perdido, con tan sólo dos puntos en su haber.