03 junio 2003
JERUSALEN (AP) .- Israel puso en libertad el martes a unos cien prisioneros palestinos de zonas de la Ribera Occidental, incluyendo el prisionero más antiguo, como gesto de buena voluntad en anticipo a una reunión cumbre con el primer ministro palestino y el presidente estadounidense George W. Bush.
Pero persistían los desacuerdos sobre el futuro de un centenar de asentamientos israelíes ilegales instalados en Cisjordania en los últimos años.
Ahmad Jubarah, de 68 años, fue puesto en libertad de la prisión de Ashkelon en el sur de Israel después de haber estado preso casi tres décadas por su participación en un ataque dinamitero en 1975 en Jerusalén que dejó 13 muertos, anunció el servicio correccional israelí.
Jubarah debía reunirse con el líder palestino Yaser Arafat en la ciudad cisjordana de Ramala antes de volver con su familia en su pueblo natal de Tormus Aya.
Israel también puso en libertad el martes a un centenar de prisioneros detenidos sin cargos ni juicio en las prisiones militares de Ketziot, Ofer y Meguido, dijo el ejército. Tayseer Jaled, un dirigente de la Organización para la Liberación de Palestina arrestado en febrero, fue liberado el lunes por la noche.
La liberación de Jubarah suscitó controversias. Para los israelíes, Jubarah es un asesino y los familiares de las víctimas del ataque objetaron su liberación.
La liberación de los prisioneros fue parte de un gesto de buena voluntad de Israel en vísperas de una reunión tripartita el miércoles entre Bush, el primer ministro israelí Ariel Sharon y el primer ministro palestino Mahmoud Abbas.
La reunión señala el lanzamiento oficial de un plan internacional de paz que se propone poner fin a 32 meses de violencia y dispone la creación de un estado palestino para el 2005.
Dirigentes de ambas partes dijeron el lunes que israelíes y palestinos formularán declaraciones por separado en la cumbre.
Un funcionario israelí dijo que Sharon emitirá una declaración el miércoles en la que aceptará el principio del establecimiento de un estado palestino. Sharon también dijo a su gabinete que probablemente formulará una declaración que comprometa a Israel a desmantelar los asentamientos levantados en violación a las leyes israelíes. El cese de la construcción de los asentamientos es un elemento clave del plan de paz.
Los palestinos consideran los asentamientos informales como esfuerzos por expandir la presencia judía en Cisjordania y la Franja de Gaza y crear nuevos obstáculos a un estado palestino.
Funcionarios israelíes dijeron el lunes que no consideran ilegales todos esos asentamientos informales y que sólo desmantelarán los que no considere necesarios para la seguridad israelí.