El 17 de junio (si es posible, antes) la Secretaría de Comunicaciones y Transportes publicará la licitación del tramo de 11 kilómetros y el puente de “Río Chico” de la supercarretera Durango-Mazatlán que le corresponde en este año, anunció el director general de esta dependencia, Rafael Sarmiento Álvarez.
Dijo que ya están disponibles 200 millones de pesos para iniciar y cubrir el anticipo a la empresa que resulte ganadora del concurso nacional. Aclaró que esto no quiere decir que sólo se va a concursar esta cantidad, sino toda la meta que tiene la SCT para este año.
En estos momentos todo el personal de la Residencia General de Carretera Federales, el Departamento de Contratación, la Subdirección de Obras y él mismo están trabajando en la elaboración de las bases de la licitación.
Lo anterior, agregó, implica elaborar la relación de los requisitos que deben cumplir las empresas que quieran participar, desde el capital contable con el que cuentan, hasta documentos que garanticen la experiencia de que hayan hecho obras similares o de la envergadura similar a la que se licitará, así como el currículo del persona que participa, la relación de la maquinaria y equipo que pretenden utilizar.
Sarmiento Álvarez afirmó que un aspecto de vital importancia en la elaboración de la convocatoria es la cuestión técnica, para especificar claramente cuáles son los trabajos que se van a ejecutar, y la orientación, también, a la empresa para que haga su propuesta.
El titular de la SCT en Durango indicó que lo anterior se está realizando con el apoyo técnico de la Dirección General de Carretera Federales, y que en cuanto surge algún dato o duda sobre los proyectos que fueron elaborados en oficinas centrales, inmediatamente reciben el respaldo para poder ser objetivos y específicos de lo que se está pidiendo.
Indicó que la segunda etapa permitirá llegar de Garabitos al Entronque del Camino Otinapa-El Saldado, aproximadamente el kilómetro 44 de la nueva carretera, incluyendo el puente de Río Chico.
Indicó que una de las intenciones es que cada tramo que se termine se ponga en operación, como puede ser en estos momentos desde el poblado 5 de Mayo hasta el entronque a la carretera a Mazatlán.
“La idea es que existan tramos operativos que se puedan utilizar; por eso la siguiente estapa va a ser del entronque Otinapa- Llano Grande”, que se plantea para el 2004.
Para comenzar la obra dijo que están disponibles 200 mdp, pero para poder ejercerlos es necesario cumplir con la licitación, luego del fallo, para entregar el anticipo que marca la ley a la empresa ganadora. Inclusive, dijo que se les pedirá a las empresas que participarán, que calcula sean unas 20 o más, que establezcan los plazos en que quieren que se les hagan los pagos.
Sarmiento Álvarez dijo que se verán las mejores condiciones para emitir el fallo; si la propuesta solvente más baja cumple en tiempo; o si no es tan baja la propuesta pero más corta en tiempo, etc., es lo que se analiza.
En la elaboración de las bases de la convocatoria participan ocho ingenieros civiles, dos topógrafos, el área de Contrataciones, la Subdirección de Obras y la Dirección General de la SCT.