Agencias
MÉXICO, D.F.- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ofreció a México ayuda humanitaria, así como acciones de coordinación local y de reducción de vulnerabilidad ante desastres naturales, después de que en los últimos días una oleada de intensas lluvias ha causado estragos en diferentes regiones de la republica mexicana.
La madrugada de ayer dejaron en la entidad un saldo de más de cinco mil familias damnificadas por el desbordamiento del río Yautepec.
En este municipio del oriente del estado, los daños se cuantificaron en más de diez millones de pesos, de acuerdo con el alcalde Víctor Gómez Sánchez.
Las precipitaciones pluviales que cayeron en Morelos también inundaron casas y negocios en Cuernavaca y la zona sur del estado, de acuerdo con el reporte de Protección Civil Estatal.
En Yautepec el panorama era desolador, pues algunas casas construidas en adobe y teja fueron devastadas completamente, así como sus animales domésticos arrastrados.
Debido a la magnitud de los hechos, el Ejército Mexicano aplicó el plan DNIII y el sector salud determinó un cordón sanitario.
La ayuda ofrecida por la OPS, a través de su programa SUMA que se aplica ante el inicio de huracanes, fundamentalmente en el Golfo, como una de las zonas más afectadas por estos fenómenos, además de Centroamérica y El Caribe.
De acuerdo con información de esa organización de Naciones Unidas, se proporcionará ayuda para fortalecer la capacidad de reacción una vez que el gobierno la solicite.
Jean Luc Poncelet, jefe de la Unidad de Preparativos para Situaciones de Emergencias y Socorro en casos de Desastre de la OPS, comentó que si bien no se puede predecir el movimiento de los huracanes con más de dos o tres días de anticipación, ni en dónde y con qué magnitud va a golpear, siempre el mismo tipo de daño.
“Por eso, nosotros trabajamos aprendiendo de eventos anteriores para saber cómo se puede mitigar el próximo desastre”, subrayó Poncelet, quien agregó que por eso, además de las medidas inmediatas, se ponen a disposición de los gobiernos herramientas para hacer que un huracán golpee lo menos posible a una población.
En tal sentido, la OPS también trabaja para reducir la vulnerabilidad frente al desastre naturales, distribuyendo material informativo tanto a profesionales como al público en general para que sepan cómo actuar en caso de desastre y para que los mismos países fortalezcan su capacidad de enfrentar una tormenta devastadora o un huracán.