Estocolmo, (Notimex).- La otorgación de la licencia 6.0, que contempla el pago de una cuota anual para correr aplicaciones como Office y sistemas operativos como Windows XP, podría ser el primer error en décadas de Microsoft en beneficio de Linux.
"Ello significa que las empresas tienen que continuar pagando a Microsoft cada año; algo que muchas de ellas no contemplaban en su presupuesto", comentó el director de Investigaciones en la sucursal de Gartner en Australasia, Robin Simpson,.
Aseguró que a muchas empresas les agrada el software que tienen y les ayuda, pero les contraría la idea de tener que pagar por éste "año tras año".
‡ Este desliz de Windows hace que Linux -popular encarnación del sistema operativo multitarea y multiusuario (Uníx)- sea más que una alternativa "subterránea" de Windows y otros productos Microsoft, y que su uso crezca en la impresión, "Web" y servidores de documentos.
Pero además de la estrategia de otorgar la licencia 6.0, cada copia del "software" de Microsoft instalado en una computadora sencilla cuesta dinero.
En contraste, una copia del "software" que está disponible en forma abierta, cuesta alrededor de 100 dólares y uno la puede instalar en cuanta computadora se tenga a la mano.
Esto significa que gerentes de empresas y autoridades gubernamentales están dándose cuenta de que confiar en un solo y dominante vendedor de "software", los deja vulnerables a la estrategia de precios que adopte de dicho comerciante. Sin embargo, tomará algún tiempo antes de que los usufructuarios regulares empiecen a utilizar los sistemas operativos Linux en sus computadoras personales, en la actualidad bajo el dominio del sistema Windows.
El año pasado, según información de Gartner, Microsoft vendió 9.6 billones de dólares de aplicaciones para computadoras personales: En un intento por no perder mercado, Microsoft anunció el pasado 14 de enero el "Programa de Seguridad Gubernamental" (PSG), el cual proveerá a los gobiernos con acceso controlado al Windows un código de origen, y el de Rusia será el primero en aprovechar esta medida.
Microsoft precisó que el PSG fue establecido para proporcionar a los gobiernos y a sus agencias principales una habilidad para tratar amenazas de seguridad en asuntos que van, desde defensa nacional, hasta protección de información personal.
Pese al negativo desempeño de la economía mundial en 2002, por el que Linux perdió un buen pedazo en el mercado de valores, esta empresa cibernética ganó en términos de adopción.
En parte debido a la pésima economía, el mercado de servidores continuó siendo fuerte para Linux en 2002, incluso una investigación prevé que el porcentaje de la plaza de Linux seguirá en ascenso en 2003, tendencia que continuaría más allá de este año.
Analistas comentaron que el sentido común percibe que Linux está ganando mercado del porcentaje de Unix (Sistema Operativo Multitarea y Multiusuario) y no de Windows.
Microsoft cuenta cada máquina pre-cargada con Windows, como parte de su porcentaje de mercado, y algunas cifras incluyen máquinas de la vieja historia de Windows 3.1.
Esto bifurca los números mal, en especial cuando las empresas investigadoras ponen demasiado énfasis en las cifras que reciben de Microsoft y de los distribuidores de Linux como Red Hat.
Cuando un cliente adquiere 10 servidores con Windows ya instalado, eso aparece como 10 servidores Windows.
Y si un cliente adquiere 10 servidores Windows sin sistema operativo instalado, compra una copia de Linux, y la instala en todos los 10, esto se cuenta como si fueran Windows y no Linux.
Sin embargo, el débil arreglo entre Microsoft y el Departamento estadundiense de Justicia dio ánimos para un ya existente y abusivo monopolio.
Microsoft no estuvo en ningún momento intimidado durante el juicio, pero la incertidumbre flotaba en el ambiente sobre lo que haría o diría Microsoft.
Pero Microsoft no ha afectado por ahora en el crecimiento de Linux, entre otras cosas, por haber enajenado a mucha clientela con amenazas de auditorías y costosos ardides de licencias, como la 6.0.
¨Cuál será el contraataque de Linux? El lucrativo mercado de contratos gubernamentales puede estar debajo de la razón para el programa de Windows.
Más de una docena de países, incluyendo China y Alemania, han estado alentando a sus ministerios y agencias a que utilicen Linux u otros sistemas operativos de código original.
La guerra aún no ha terminado, pues es precisamente en el sector gubernamental donde la batalla entre sistemas operativos de código original y los productos Microsoft será más fuerte durante 2003 y, quizás, por muchos años más.