Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Los magos no fueron tres, ni tampoco reyes

TORREÓN, COAH.- La historia de los tres Reyes Magos es sólo un cuento o mito, cuyo origen se remonta a la era de San Francisco de Asís, santo y fundador de los padres franciscanos, quien fue el primero en representar el nacimiento del Niño Jesús, el 25 de diciembre de 1223.

Para acercarnos a esta leyenda, se entrevistó al sacerdote Tobías de la Torre de la Torre, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, del ejido La Unión, quien narró lo siguiente:

“Lo que la iglesia celebra y dice el Evangelio según San Mateo, es que unos magos venidos en caravana –podrían haber sido 50 o hasta 100 hombres- del Oriente, fueron a adorar al Niño Jesús a Belén. Ahí no especifica que hayan sido reyes o que fueran tres, ni que se trasladaron en elefante, camello o caballo’’.

San Francisco de Asís, además de ser el creador del primer Nacimiento, también fue el que le dio vida a los personajes de los tres magos -que sólo fueron magos, más no reyes-, con la intención de que le fuera más fácil representar a toda la humanidad en el Nacimiento, ya que de otra manera tendría que instalar como mínimo, 50 figuras o más.

Por esta razón decidió personificar a la humanidad a través de las tres razas humanas más importantes como lo son: La negra, amarilla y blanca; colocándolos sobre un elefante, un camello y un caballo, ya que en aquel tiempo estos animales eran el medio de transporte de cada uno de ellos, respectivamente, explicó el sacerdote.

Un mago era un sabio que investigaba las estrellas, las cuales servían de orientación en su caminar por el desierto y mar, pues en ese entonces no contaban con brújulas, o como en la actualidad, con radares.

El sacerdote De la Torre comentó que los magos que integraban esa caravana descubrieron en el cielo una estrella que no tenía explicación alguna, pues su ubicación era baja, pero sabían de la profesía de Balaam que había anunciado la aparición de una peculiar estrella el día que naciera el Mesías.

Dos años, es la edad que tenía Jesús cuando los magos lo conocieron y adoraron en una modesta casa de Belén; encima de la cual se detuvo la estrella, por ello Herodes, quien era el único rey, ordenó matar a todos los niños de esa edad, para que muriera Jesús.

La iglesia católica celebra la adoración de los magos el siguiente domingo al primero de enero que se llama la Epifanía, que significa “manifestación, revelación y aparición de Dios a todo el mundo’’.

En conclusión, se puede decir que bajo la apariencia de una narración sencilla y popular, el relato de la adoración de los magos de quienes sus colores de la piel fueron imaginados en la edad media, para que representara cada uno de ellos a las razas conocidas en aquel entonces, contiene una gran profundidad teológica.

Su historia

El origen de la tradicional Rosca de Reyes se remonta a la época de los frailes de las diferentes órdenes que vinieron a México a evangelizar a los indígenas.

Mucha gente suele decir que es una tradición mexicana, y ciertamente lo es, sólo que sus orígenes se encuentran en la Edad Media, ya que desde entonces se realizaban fiestas en honor de los Santos Magos, que llegaron siglos atrás a entregar regalos al Niño Dios.

Fue en Francia donde comenzó a celebrarse esta fecha (seis de enero) de partir la rosca, cristianizando la costumbre pagana de elegir “un rey de las fiestas’’, por lo tanto, la gente se reunía en la noche familiar alrededor de una rosca de pan dulce adornada de azúcar y frutas cristalizadas.

En ese pan se escondía un haba –ahora es una figura de plástico- que significaba el ocultamiento de Cristo cuando el rey Herodes, por temor a perder su reino por el Mesías, mandó matar a los niños que nacieron en ese tiempo; por ello el pequeño se encuentra dentro de la rosca y representa al niño que José y María protegieron para no ser asesinado.

Ahora, al partir un trozo de pan con el cuchillo, éste simboliza el peligro en el que se halla el niño Jesús; la persona que se encuentra la figurilla al cortar el pan, es, según la costumbre, anfitrión de otra celebración posterior que se celebra el dos de febrero “día de la Candelaria’’.

En esa fecha, se deberá confeccionar un ropón para el niño Jesús, vestirlo de gala, y ofrecer a los invitados los tradicionales tamales (alimento prehispánico por excelencia) y chocolate, bebida de los dioses.

Como vemos, la costumbre de partir la rosca de Reyes es una fusión de diversas culturas a través del tiempo que da sentido y origen a esta hermosa tradición mexicana.

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 15567

elsiglo.mx