MIAMI, EEUU, (Reuters) - Los manatíes de Florida, aunsiendo una especie en peligro, con protección y cuidados que sólo se brindan a un puñado de animales de la Tierra, pierden hasta un diez por ciento de su población cada año, muchos aplastados o mutilados por barcos.
Sin embargo, en la actualidad, hay una iniciativa para que el manatí pase a ser considerado una especie "amenazada" y ya no "en peligro" en Florida, intensificando una larga batalla entre la industria marítima y los conservacionistas.
La decisión que debe tomar esta semana la Comisión para la Conservación de la Vida Marítima y Silvestre de Florida tendrá poco impacto práctico en la protección al manatí, ya que el mamífero marino podría continuar en la lista federal de especies amenazadas, más allá de lo que decida el estado.
Sin embargo, los defensores del manatí dicen que podría ser muy peligroso enviar al público un mensaje que diga que este animal está libre del peligro de extinción.
"Las perspectivas de futuro del manatí siguen siendo terribles", dijo Patti Thompson, directora de ciencias del Club para la Salvación del Manatí, que lucha por proteger a los aproximadamente 3.000 manatíes que quedan en las aguas de Florida.
Los conservacionistas llevan años batallando contra la industria marítima sobre si pueden coexistir los manatíes y los barcos, --hay cerca de un millón registrados en el estado--, en las abarrotadas aguas del Florida.
Los gigantes marinos herbívoros datan de hace 45 millones de años y alcanzan unas dimensiones promedio de unos tres metros de largo, con un peso de cerca de 454 kilogramos.
El año pasado, el estado registró la muerte de 305 manatíes, un 10 por ciento de la población actual. Un total de 95 de esas muertes fueron causadas por barcos, y sólo 59 perecieron por causas naturales.
Para proteger a los manatíes, el estado instituyó zonas de velocidad en las aguas de Florida, obligando a los barcos a bajar su velocidad a ocho kilómetros por hora para evitar lastimar a los manatíes que estan cerca de la superficie.