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PUEBLA, Pue.- Los gobernadores del PRI acordaron llamar a la unidad al presidente y a la secretaria general del tricolor, Roberto Madrazo y Elba Esther Gordillo, para no generar un “resquebrajamiento” que ponga en riesgo la posibilidad de recuperar la Presidencia de la República en el 2006.
No obstante los llamados a la unidad, las divergencias entre los gobernadores prevalecieron hoy. De acuerdo con los mandatarios consultados, durante la cena en la Casa Puebla -celebrada ayer por la noche con la presencia de 11 mandatarios-, Tomás Yarrington, de Tamaulipas, fue designado como el encargado de hablar con los líderes priistas para hacerles saber su exigencia: unidad.
Asimismo, Yarrington tendrá un papel de “facilitador y de enlace” de las negociaciones en torno de la Reforma Fiscal, tanto con la dirigencia priísta como con el resto de gobernadores de su partido y el Gobierno Federal.
El problema de la unidad, agregaron fuentes del PRI, “no está solucionado pero ya no es fundamental”, pues ahora enfocan sus baterías en sacar la Reforma Fiscal.
Sin embargo, Ángel Sergio Guerrero Mier, gobernador de Durango, afirmó que de hecho todos sus colegas decidieron entrar en contacto con sus dirigentes partidistas ante la crisis que enfrentan, derivado del relevo de Elba Esther Gordillo por Emilio Chuayffet en la coordinación de los diputados federales.
Por su parte, Manuel Angel Núñez Soto, de Hidalgo, rechazó que las reuniones sostenidas por gobernadores priístas con Elba Esther Gordillo en Atlixco -Puebla- y con el presidente Vicente Fox, en el Distrito Federal, signifiquen una conspiración pues “aquí sólo hay grupos de trabajo que luchamos por el futuro de México”.
Al preguntarle por qué no fueron los mismos gobernadores los que asistieron a las reuniones, Núñez Soto dijo: “Desconozco por qué se ha hecho la invitación en ese sentido. Lo único que les puedo asegurar es que estamos trabajando en favor de México”.
Mientras tanto, fuentes de la dirigencia priista señalaron que tuvieron conocimiento de que el gobernador Yárrington sería quien llevaría el mensaje. También minimizaron las divergencias, que ubicaron en los gobernadores de Veracruz, Miguel Alemán; Sonora, Eduardo Bours; Coahuila, Enrique Martínez, y el propio Yárrington, mientras que perciben en el resto de ellos una postura de poner fin al conflicto.