Reuters
VIENA, Austria.- Rusia acusó ayer a Estados Unidos y a otros 11 países de tener como rehén a un pacto mundial de prohibición de todo tipo de bombas nucleares y los exhortó a ratificar el tratado lo más pronto posible.
El embajador de Rusia ante organizaciones internacionales en Viena, Grigory Berdennikov, hizo esta acusación en el segundo día de una conferencia para tratar de acelerar la puesta en marcha del Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares (TPCN).
“El tratado (...) sigue siendo un rehén de la voluntad política de 12 estados”, dijo Berdennikov a los diplomáticos de dichas naciones, a las que llamó “la docena sucia”.
Estados Unidos no está participando en esta conferencia.
Como contraste, el embajador de China, Zhan Yan, dijo que su gobierno estaba comprometido con el TPCN y “haría todo lo posible para obtener la pronta ratificación del Congreso Popular Nacional”.
La embajadora australiana, Deborah Stokes, dijo que la deteriorada situación de la seguridad en el mundo destacaba la necesidad de que el TPCN entrara en vigor lo antes posible, pues así se observaría el cumplimiento mundial del mismo a través de 337 estaciones de vigilancia en todo el mundo.
“Las tensiones actuales vinculadas al tema nuclear en Oriente Medio y en la península coreana son un recordatorio poderoso de la necesidad absoluta de disminuir las oportunidades para la proliferación de armas nucleares”, dijo.
La parlamentaria canadiense Aileen Carroll expuso la perspectiva de Canadá exhortando a las 12 naciones faltantes a que ratifiquen el pacto.
“Las armas nucleares, terriblemente letales, no discriminan y son dañinas para todos, y nunca se deben usar”, expresó Carroll.