Fueron acuñadas por los años de 1689 hasta 1730, aproximadamente, y los cortes se hacían para determinar el valor de la moneda por su peso. Hasta el año de 1737 se mantuvo la valoración de una cuartilla, con equivalencia de 2/4 de real; un cuarto de real era igual a tlaco, y un octavo era igual a pilón; pero después de esa fecha, incluyendo la época de la República, una cuartilla equivalía a ¼ y no a 2/4. La cuartilla equivalía a dos centavos de real, ochavas o tlacos y los octavos, equivalían a dieciseisavos, avos o avitos. Otros nombres con los que el pueblo conocía diversas monedas de bajas denominaciones, era de “necesidad”, “guitones”, “obsidionales”, “fichas”, “tanteos”, “pilones”, “jolas”, “cacharpas”, “ochavas” y “avitos”. La cuartilla de plata se acuñó consecutivamente en la CECA de México de 1794 a 1816 en el Virreinato y después en la República de 1842 a 1863” (Monedas Mexicanas de J.L.R.T.).
Las monedas acuñadas en México, durante el Virreinato, tenían que ver con los reyes en turno, de España, y así vemos en la obra de Pradeau edición 1936 en Los Ángeles, Calif., que “según Herrera, durante el reinado de Carlos II, la Casa de Moneda de la Ciudad de México troqueló muy pocas piezas de a ocho (reales). En dicha obra se encuentra el escudo de armas que aparece en la acuñación del período 1665-1700, es semejante al que se usó en los cuños de Felipe II. Medina asegura que el escudo de armas comprendía el emblema de la Casa de Borbón. Probablemente hace esta mención porque Carlos II estuvo casado con una Borbón de 1676-1689; pero el examen que se hizo en cierto número de monedas de este monarca no se encontró en ninguno de ellos el escudo de la Flor de Lys”.
Por otra parte, sigue diciendo Pradeau: “Felipe V, nacido en Versalles el 19 de diciembre de 1683, fue el primero de la dinastía de los Borbones. Como Carlos II murió sin sucesión, por su última voluntad, pasó el reino a Felipe, Duque de Anjou. Por la circunstancia de tener el Archiduque Carlos de Austria los mismos derechos a la sucesión española, el balance político-religioso de Europa se vio alterado por la lucha de doce años, conocida como la Guerra de Sucesión Española”.
Felipe V reinó dos veces, el primer período duró de 1700 a diez de enero de 1724, fecha en que abdicó en favor de su hijo mayor; pero la muerte prematura de Luis I, que ocurrió el 31 de agosto de 1924, repuso en el trono a Felipe. Su segundo reinado duró hasta su muerte, el 9 de julio de 1746.
Los Ensayadores eran sumamente importantes y responsables por la ley de los metales, y tenían el privilegio de grabar sus iniciales en la moneda.